De forma inesperada, un anuncio relacionado con la salud del Rey Abdalá II corta durante algún tiempo el momento de felicidad que vive la Familia Real jordana desde que este fin de semana Abdalá II y Rania de Jordania se convirtiesen en abuelos por segunda vez tras el nacimiento el pasado domingo de la hija de la Princesa Iman y su marido Jameel Alexander Thermiotis . Tras estar presente tanto en el emotivo acontecimiento familiar como en diferentes actos con los que estaba comprometido por su agenda oficial, el Rey debe ser intervenido este mismo martes 18 de febrero por un contratiempo de salud. Tal y como ha comunicado escuetamente la Familia Real hachemita, el monarca ha sido intervenido en «una sencilla operación para tratar una hernia». Aunque se desconocía que el Rey atravesase un estado de salud marcado por la dolencia de una hernia incisional, el escrito tenía la intención de tranquilizar dejando claro que la cirugía es menor y que se llevará a cabo en la Ciudad Médica Al Hussein. A sus 63 años, el Rey goza de buena salud tal y como denota su aspecto y su compromiso con la agenda que en estas semanas se verá afectada por su intervención, aunque desde la Casa Real no han querido detallar en qué medida puede sufrir posibles cambios tras el paso por quirófano del monarca. En ese caso, su hijo mayor, el Príncipe heredero Hussein le sustituirá en la responsabilidad ante los asuntos de Estado como ya hizo hace dos años en el marco de la intervención de urgencia que atravesó el Rey por problemas en la espalda. En abril de 2022, Abdalá II viajaba hasta Frankfurt para ser operado de un disco intervertebral en la columna que le provocaba fuertes dolores que no pudo soportar más con 60 años. «Durante su servicio en las fuerzas especiales del Ejército, el rey solía sufrir de intermitentes dolores de columna, que se han agudizado recientemente debido a la presión sobre el nervio, lo que dio lugar a que los médicos aconsejaran al monarca a someterse urgentemente a una intervención quirúrgica», comunicó un escrito oficial acerca de la decisión que había tomado la Casa Real de carácter urgente. La operación resultó un éxito y entonces el mandatario sólo necesitó una semana en Alemania para recuperarse de la misma. Estos días, el Rey sumaba a su vida su labor como abuelo por segunda vez y posaba en una tierna fotografía con su nieta en brazos y acercándosela a la cara para darle un beso. Una estampa que recordó a la compartida hace unos días por el Príncipe Hussein en sus redes sociales, en las que mostraba el bonito vínculo que tiene el monarca con su primera nieta. «Iman con su precioso abuelo. Fe y amor», rezaba la publicación de una imagen en la que podía verse a la pequeña agarrando la cara de su abuelo y a él mirándola fijamente con gesto cariñoso.
