Los 10 lagos más impresionantes de España para una escapada inolvidable
España es un país de contrastes, y su
geografía está salpicada de paisajes naturales que parecen sacados de un
cuento. Entre ellos, los lagos y lagunas ofrecen rincones de
ensueño donde desconectar del bullicio y sumergirse en la serenidad del agua y
la montaña. Desde los icónicos Lagos de Covadonga en Asturias
hasta la misteriosa Laguna Negra en Soria, Civitatis,
plataforma de distribución online de visitas guiadas, excursiones y actividades
en español por todo el mundo, ha seleccionado los 10 lagos más bellos
del país, perfectos para disfrutar de una escapada inolvidable prácticamente en
cualquier época del año.
Lagos
de Covadonga (Asturias)
En
el Parque Nacional de los Picos de Europa se encuentran los famosos Lagos
de Covadonga: Enol, Ercina y la laguna Bricial. Estos
lagos, declarados Reserva de la Biosfera por la Unesco en el año 2003,
son uno de los lugares más emblemáticos de Asturias. Aquí podrás
recorrer senderos rodeados de imponentes montañas y respirar el aire puro de la
alta montaña con sus vistas panorámicas y su serenidad. Son una parada
obligatoria para los amantes de la naturaleza.
Las
Lagunas de Mata y Torrevieja (Alicante)
¿Sabías
que en España hay un lago rosa? La Laguna de La Mata y
Torrevieja, en Alicante, es un espectáculo visual único. Su
característico color rosado se debe a su alta concentración de sal
y a la presencia de bacterias especiales que le dan ese tono. Es un
lugar idóneo para los que buscan una experiencia curiosa y diferente, perfecto
para una tarde de fotografía en un entorno muy peculiar. Noviembre
es un buen momento para descubrir y visitar esta laguna rosa.
Lago
de Bañolas (Gerona)
El
lago de Bañolas, el más grande de Cataluña, es ideal para un día
de desconexión en plena naturaleza. Aquí puedes practicar deportes
acuáticos, disfrutar de un paseo o simplemente relajarte mientras
observas la serenidad del paisaje. Con más de 250.000 años de historia
geológica, este lago es también uno de los conjuntos kársticos más
extensos de España, lo que le da un atractivo especial a este rincón de Gerona.
Además, sus aguas proceden de la Alta Garrocha, donde se filtran
y discurren a través de una serie de canales subterráneos hasta llegar
aquí.
Laguna
Negra (Soria)
Ubicada
en los Picos de Urbión y a tan solo 50 kilómetros de la capital,
la Laguna Negra es uno de los lugares más enigmáticos, y a la vez
hermosos, de Soria. Su origen glaciar y las paredes graníticas
que la rodean le otorgan un aire de misterio. Las leyendas que
giran en torno a esta laguna, que hablan de monstruos y misterios,
añaden un toque de magia a este paraje natural de aguas oscuras y
profundas.
Lago
de San Mauricio (Lérida)
En
el Pirineo catalán, el Lago de San Mauricio es uno de los
rincones más impresionantes para disfrutar de la montaña. Ubicado
a 1.910 metros de altitud sobre el nivel del mar, sus aguas cristalinas,
que a veces adoptan un tono esmeralda, reflejan los paisajes de este paraíso
natural, creando una imagen perfecta para una escapada fotogénica y
tranquila en la naturaleza. Además, sus cómodos senderos hacen
que las rutas sean de lo más accesibles para prácticamente todas las
edades. Sin duda, otro de los lagos más bonitos de España.
Lago
del Valle (Asturias)
Aunque
los Lagos de Covadonga son los más famosos, Asturias tiene otros
rincones igual de mágicos, como el Lago del Valle. Este es el lago
más grande de la región y está ubicado en el Parque Natural de Somiedo.
La ruta de senderismo que te lleva hasta allí es en sí una experiencia
encantadora, y el lugar es conocido localmente como el “Lago del Ajo”.
Además, durante el recorrido podrás ver los teitos, tradicionales
construcciones de piedra con techo de paja, típicas de las zonas
de montaña.
Laguna
de Fuente de Piedra (Málaga)
Para
quienes aman la fauna, especialmente los flamencos, la laguna
de Fuente de Piedra es una parada obligada de la provincia de Málaga.
Este humedal, el más grande de Andalucía, es el refugio de miles
de flamencos rosados que migran aquí para anidar cada año,
creando un espectáculo único. Además, la serenidad y el encanto del
entorno hacen de este lugar un espacio ideal para reconectar con la
naturaleza y contemplar uno de los mejores paisajes de la región.
Lago
de Sanabria (Zamora)
El
Lago de Sanabria, en Zamora, es otro de esos destinos que no
puedes pasar por alto. Según cuenta la leyenda, bajo sus aguas descansa
el pueblo sumergido de Valverde de Lucerna, castigado por los dioses por
su egoísmo. Pero dejando atrás los mitos, este lago de origen
glaciar, formado hace más de 10.000 años, es un lugar espectacular
para desconectar y disfrutar de sus playas de arena y piedra. Un destino
ideal para explorar la Zamora más desconocida.
Lagunas
de Ruidera (entre Albacete y Ciudad Real)
Entre
Albacete y Ciudad Real, las Lagunas de Ruidera te
trasladan a un entorno que parece salido de una novela. Conocido como
uno de los humedales más bellos de la península, este paraje cuenta con pequeñas
cascadas, aguas cristalinas de tonos turquesa y miradores
con vistas impresionantes. Si buscas un lugar mágico, las Lagunas de
Ruidera son perfectas para disfrutar de la naturaleza en todo su
esplendor.
Gorg
Blau (Mallorca)
Por
último, nos trasladamos a la isla de Mallorca y su sierra de
Tramontana, donde se encuentra Gorg Blau. Aunque en realidad es un embalse
artificial, sus aguas de un intenso color azul y su ubicación entre montañas
lo convierten en uno de los paisajes más fascinantes de las Baleares.
Ubicado entre el Puig Major y el Puig de Massanella, Gorg Blau
es perfecto para una excursión en la que podrás disfrutar de la tranquilidad
de las montañas y el encanto de Mallorca más allá de sus playas.