La Confianza ya tiene fecha de apertura de su tercera tienda
La Confianza, un negocio familiar de 84 años, ampliará su oferta de servicios al abrir su tercera tienda en un centro comercial josefino.
La nueva tienda está prevista a inaugurarse el 15 de noviembre en Lincoln Plaza, en Moravia. Este local se une a la tienda de Grecia, la primera de la cadena, y la ubicada en Curridabat.
La Confianza tiene sus orígenes en 1941, de la mano de Vicente y Enrique Bolaños.
Don Vicente, con la autorización de varias personas, invirtió los ahorros que le confiaban ante la falta de bancos en esa época, de ahí el nombre de la tienda, relataron a La Nación sus sobrinos nietos, los hermanos Bernardo Bolaños, gerente general, y Laura Bolaños, gerente comercial.
“Se le ocurre a mi abuelo decirle a un par de amigos: ‘señores, ustedes que ya tienen una cantidad de dinero guardado conmigo, ¿por qué no me prestan ese dinero para empezar una empresa nueva o un negocio nuevo?’, ahí es donde empezó el primer localito de La Confianza eh que este fue en el mercado central de Grecia", indicó Bernardo.
Ese inicio fue una venta de abarrotes al por mayor. Con el tiempo la marca dio un giro hacia la venta de ropa, inicialmente confeccionada en Costa Rica y luego importada.
“Ahí empezamos también con otra parte que ha sido un eje importante para nosotros, que es acompañar el tema del producto de una muy buena experiencia de servicio al cliente, de una comunicación cercana tanto en los pisos de venta como en redes sociales”, explicó Laura.
Al fallecer don Vicente, la gestión quedó a cargo de don Enrique, quien se encargó de hacer el relevo generacional con los padres de Bernardo y Laura.
Tras enfermarse el papá de ambos, don Carlos Bolaños, el negocio quedó a cargo de su esposa, María Luz Álvarez. “A partir de ese momento dejamos nuestras ocupaciones”, explica Bernardo, que trabajaba en la banca de inversiones, y Laura como arquitecta, y se encargaron de la administración.
La Confianza importa directamente de un proveedor en Dinamarca y cuenta con proveedores nacionales, principalmente en productos cosméticos y estilos de vida.
“Eso es una ventaja competitiva, creo que tenemos productos que son de buena calidad a un precio muy razonable, que no están dentro de los típicos artículos de pronta moda, que son prácticamente desechables”, indicó Bernardo, de 42 años.
Laura aseveró que son prendas con responsabilidad en su producción. “Sabemos desde su origen, que no incluye explotación de mano de obra y que es sostenible con el ambiente”, recalcó.
La tienda ubicada en Grecia tiene una cafetería y en Curridabat, cuenta con un vivero. La ampliación a una tercera tienda surgió de la interacción con los clientes y de la evaluación financiera.
“Empezamos con una tienda que prueba que tenemos una comunicación activa, efectivamente tenemos un público ya cautivo de aquel lado del país, que anteriormente tenían que venir hasta Grecia a visitarnos, y ahorita lo que estamos es acercándonos más a ellos”, destacó Laura, de 38 años.
Agregó que Lincoln Plaza resulta un paso para atender la demanda de esta zona.
La marca también cuenta con una tienda en línea, y el siguiente paso en la lista apunta hacia una cuarta tienda en Heredia, señaló Bernardo.
“Somos totalmente clientecentristas, hemos creado una comunidad a la que somos muy cercanos, los acompañamos en su vida. Queremos ser un centro de experiencias para la gente”, aseveró Laura.
