Euroliga: No hay manera para el Real Madrid fuera de casa. Derrota ante el Bayern (90-84)
Es una historia ya repetida para el Real Madrid esta temporada. Un guion demasiado familiar para los de Scariolo, que se desplomaron de mala manera en la segunda parte ante el Bayern. Y la cara del técnico italiano lo decía todo después, cuando hablaba de una falta de intensidad y un nivel defensivo muy por debajo de lo que necesita una competición como la Euroliga. Los madridistas se fueron metiendo en una espiral de la que no consiguieron salir tras volver del descanso demasiado fríos. Sólo anotaron 27 puntos en la segunda mitad, con un 0 de 7 en triples en el tercer parcial, como si se hubieran visto con la opción de ganar por fin fuera de casa y se hubieran puesto a temblar.
Y es que parecía que los blancos podían, por fin, desbloquear este curso la maldita pantalla de ganar fuera. Pero qué va. Todas las victorias de los de Scariolo siguen siendo al calor del Movistar Arena. Lejos de ahí han caído en Vitoria en la Liga Endesa; en Bolonia, ante la Virtus, en Belgrado frente al Partizan y el Maccabi, y también en Múnich, donde tampoco pudieron disfrutar con la camiseta visitante. Y eso que reaccionaron bien a un comienzo en el que el Bayern, el peor equipo en anotación de los veinte de Euroliga, metió diez puntos sin fallo en poco más de minuto y medio. Un arranque muy poco acorde con la situación deportiva y clasificatoria de los germanos, liderados en ese momento por los puntos de Isiaha Mike y la dirección de juego de su pívot, Voigtmann, que sacaba a bailar a Tavares lejos del aro y lo castigaba desde el triple o doblaba el balón para un compañero.
Pareció un espejismo, que duró lo que necesitó el Madrid para darse cuenta de que el SAP Garden no era un jardín y había que quitarse el chándal. Trey Lyles fue el primero en tirar de los suyos. En cuanto el Madrid se ajustó en defensa y los alemanes volvieron a sus porcentajes, el marcador primero se igualó (27-25, min 10) y después se disparó a favor de los visitantes. Campazzo forzó una antideportiva a Voigtmann, que pareció más bien un penalti de fútbol, seguida de una técnica que supuso la tercera falta del pívot. Se disparó el Madrid hasta los siete de ventaja en el amanecer del segundo parcial (27-34), aunque un conjunto de malas decisiones devolvió el equilibrio (35-34). Pero ahí se volvió a descolgar el Bayern. Justo antes del descanso, el Madrid alcanzó su máxima ventaja, un +16 que se quedó en +13 con la bocina del entretiempo (44-57). Detalles de Hezonja y de Maledon en ataque, y de Abalde en defensa parecían suficientes. El partido no estaba sentenciado, pero sí bien encarrilado. Lo que no esperaba ni Scariolo fue lo que vino después: un parcial de 46-27, con un ex, Rathan-Mayes, queriendo reivindicarse y Da Silva haciendo lo que quería en la pintura. Isiaha Mike se fue hasta los 29 puntos, su mejor anotación en la Euroliga. Pero es que el Madrid se lo puso demasiado fácil.
90. Bayern Múnich (27+17+25+21): Obst (5), Jovic (8), Lucic (4), Mike (29), Voigtmann (3), -cinco inicial-, Jessup (7), Gabriel (-), Kratzer (-), Rathan-Mayes (14), Baldwin (10), Da Silva (10).
84. Real Madrid (25+32+10+17): Maledon (15), Abalde (6), Hezonja (7), Lyles (20), Tavares (13) -cinco inicial-, Campazzo (8), Llull (3), Deck (5), Okeke (3), Krämer (-), Garuba (4).
Árbitros: Ilija Belosevic (Serbia), Igor Dragojevic (Montenegro) y Gytis Vilius (Lituania). Excluyeron por dos faltas antideportivas a Leon Kratzer (m.14).
Incidencias: Partido de la séptima jornada de la Euroliga disputado en el SAP Garden de Múnich.