Kim Kardashian se enfrenta una vez más a las críticas por cómo está criando a sus hijos. PETA, la organización sin ánimo de lucro por la protección de los animales, ha lanzado un comunicado por los regalos que la empresaria ha tenido en casa estas navidades. Concretamente, los cuatro cachorros que ha sumado a la familia, uno por cada hijo. North, de 12 años , Saint, de 10, Chicago, de 7, y Psalm, de 6, recibían como regalo de Papa Noel una cría de pomeranian mini a cada uno, dos de color negro y dos de tono rubio. «Los cahorros no son peluches, es una verdadera vergüenza que Kim haya perdido la oportunidad de convertirse en representante de cachorros de protectora de animales. En vez de eso se le está criticando, y con razón, en redes sociales», ha asegurado Ingrid Newkirk, fundadora de PETA. «Pueden intentar arreglar las cosas mandando a sus hijos a hacer voluntariado en un refugio local, o pagando a una protectora para que puedan realizar un maratón de adopciones. O que al menos colaboren con los gastos de un día de esterilización para ayudar a frenar la crisis de los cachorros sin hogar», ha reclamado PETA. Y no solo señalan a Kim, también a su hermana Khloé que ha sumado otro perro más a su familia por las navidades, en su caso un cachorro de labrador retriever negro. A lo largo de los años, las acciones de Kim Kardashian han causado en varias ocasiones que los animalistas se vuelvan contra ella. No solo por sus mascotas, siempre de raza, sino también por el uso de pieles naturales. Incluso, en 2015 fue muy comentado que vistiera a su hija North con un abrigo de piel de zorro durante la Semana de la Moda de Nueva York. En 2019 lo volvió a hacer: estuvo en un santuario de elefantes en Bali y sus seguidores la acusaron de ignorancia por no conocer la crueldad con el que algunos de estos santuarios tratan a los animales. Ella, sin embargo, se defendió diciendo que era una organización que trabaja para salvar a estos mamíferos: «Investigamos a fondo antes de ir», comentó. Lo curioso es que estos cuatro perritos nuevos que han llegado al hogar de Kim Kardashian no son los únicos. La empresaria ya publicó en 2019 que habían recibido a otros dos pomeranians, uno blanco y uno negro cuyos nombres escogió North, la hija mayor de la 'socialite'. Se sumaban a otro perrito de la misma raza al que llamaron Sushi, por lo tanto los dos nuevos también tenían referencias a la cultura japonesa en sus nombres: Sake y Soba o Soy (que quiere decir soja). Lo que no se conoce es qué fue de esos tres cachorros, y si siguen en la familia. Lo cual ha generado todavía más malestar entre los animalistas que siguen a la conocida y mediática familia.
