Zelenski niega el ataque a la residencia de Putin

Ucrania considera la afirmación rusa de un ataque con drones contra una residencia de Vladímir Putin como un intento de sabotear el creciente entendimiento entre Kiev y Washington, declaró Volodimir Zelenski este martes, mientras continuaban los ataques rusos.

«Esto se debe a que hubo una conversación bastante exitosa y una reunión positiva de nuestros equipos durante el mes, incluyendo mi encuentro con el presidente Trump», explicó el líder ucraniano, afirmando que los primeros documentos entre las partes estarán listos para firmarse ya en enero.

Zelenski reveló que su equipo informó a los homólogos estadounidenses que las acusaciones de Rusia carecen de fundamento, señalando que EE UU tiene la capacidad técnica para verificar las afirmaciones del Kremlin.

Según el Instituto para el Estudio de la Guerra, con sede en EE UU, no existe prueba alguna de que se haya producido dicho ataque con drones. Sus analistas señalan que los ataques ucranianos con drones contra territorio ruso suelen ir acompañados de vídeos de operaciones de defensa antiaérea, explosiones, incendios, así como declaraciones de autoridades locales o informes de medios regionales, ninguno de los cuales se ha registrado en este caso.

Volodimir Zelenski señaló que le entristecen las declaraciones de algunos países, incluyendo India, Pakistán y Emiratos Árabes Unidos, que se apresuraron a condenar el supuesto ataque con drones sin esperar ninguna prueba. «¿Dónde está su condena al hecho de que los rusos bombardean a nuestros niños y matan a nuestra gente todo este tiempo? No oigo nada de India ni de los Emiratos al respecto», dijo Zelenski.

«Los tres Estados no emitieron ninguna declaración oficial cuando un misil ruso real impactó en la sede gubernamental ucraniano el 7 de septiembre de 2025», señaló también Andrí Síbiga, ministro de Asuntos Exteriores.

Cientos de miles de familias en Kiev y Odesa han permanecido total o casi totalmente sin electricidad en sus hogares durante cuatro días, tras un devastador ataque ruso el sábado contra plantas de generación eléctrica y la red eléctrica local. Algunos solo tienen suministro esporádico, mientras las temperaturas permanecen bajo cero. La mayoría de los ucranianos en otras partes del país sufren cortes programados de electricidad, introducidos para distribuir equitativamente la limitada cantidad de energía producida. «Ya nos hemos adaptado y no nos intimidará Rusia», declaró a La Razón Volodimir Omelchenko, experto en energía del Centro Razumkov de Kiev, mientras esperaba que las reparaciones mejoren la situación en los próximos días.

Aunque la situación en el frente sigue complicada, con Moscú buscando maximizar los avances de sus tropas en medio de las conversaciones en curso con EE UU, Ucrania rechazó las afirmaciones rusas de avances hacia la ciudad de Zaporiyia, en el sur.

Oleksandr Sirski, el principal general de Ucrania, informó este martes que Rusia ha perdido 406.000 soldados muertos o heridos en 2025 en Ucrania. Por primera vez durante la invasión, el tamaño del ejército invasor no ha crecido, señaló también, afirmando que Rusia ha sido incapaz de cubrir sus pérdidas con nuevos reclutas. Esto ilustra las posibles dificultades de Rusia para atraer suficientes nuevos soldados sin recurrir a una impopular movilización obligatoria.

Ucrania está discutiendo con EE UU la posibilidad de este último despliegue de tropas en Ucrania como parte de posibles garantías de seguridad en caso de un acuerdo de paz, declaró Zelenski a los periodistas este martes. Sin embargo, no confirmó la afirmación del primer ministro polaco de que Washington está dispuesto a enviar sus fuerzas a la línea de demarcación o frontera entre Ucrania y Rusia.

Sin revelar detalles, Zelenski dijo que las garantías de seguridad bilaterales por parte de EE UU serían similares a las previstas en el Artículo 5 de la OTAN, que considera un ataque contra cualquiera de sus miembros como un ataque contra todos los demás miembros de la Alianza.

Los asesores de seguridad de los líderes de Ucrania y sus socios europeos, así como otros miembros de la Coalición de los Dispuestos, se reunirán en Kiev el 3 de enero para discutir las contribuciones que estos países podrían hacer a la seguridad a largo plazo de Ucrania, anunció Zelenski. A continuación, los líderes europeos se reunirán en París el 6 de enero, agregó.

Sin embargo, las acusaciones rusas de un supuesto ataque con drones contra la residencia de Putin muestran la potencial fragilidad de cualquier garantía de seguridad, especialmente a la vista de la reacción pública de Donald Trump, han señalado varios analistas ucranianos. Las garantías no valdrán nada y no detendrán a Rusia de atacar de nuevo si Moscú sabe que EE UU u otros socios de Ucrania se negarán a ayudar a Ucrania si esta última es acusada de lanzar un ataque imaginario contra Rusia.

En cualquier caso, los ucranianos reconocen cada vez más que su propio país, apoyado por los socios, probablemente sería su mejor «garantía de seguridad» disponible.