El Leganés hurga en la herida y hunde al Málaga (0-2)
Tres nuevos puntos que vuelan de La Rosaleda tras la victoria, justa, del Leganés ante un Málaga que cada jornada que pasa se apaga.
Todavía llevamos ocho jornadas de LaLiga y los nervios ya son evidentes en el Málaga. Los malos resultados afectan, y mucho, y la presión psicológica comienza a atenazar a los jugadores del Málaga. Los nervios son palpables. Si además recibes a un rival que defiende de maravilla -sólo tres goles encajados hasta el momento- y que aprovecha como nadie sus escasas ocasiones de gol, el temor es evidente.
Como era de esperar, la primera mitad fue movida pero tensa. El Málaga buscaba no perder la pelota y hacerlo fácil para no complicarse la vida. Los errores individuales los ha pagado con creces, derrotas y puntos. Sabía Míchel que el Leganés iba a presionar y no le iba a dejar jugar y así fue. Además, los jugadores de Garitano lo tenían claro porque cuando un rival se escapaba intentaban siempre frenarlo aunque fuera en falta. Con interrupciones y algunos parones fueron llegando las ocasiones de gol. Primero lo intentaron Jony y Mula, sin acierto, como Amrabat por parte pepinera. Pero la más clara la tuvo Rolan, escorado, que remató un magnífico pase que Cuéllar rechazó al poste y Mula envió fuera. La falta de gol es evidente en el Málaga, que poco después casi encaja el tanto tras un remate de Amrabat que Roberto logró rechazar in extremis. Amarabat, por cierto, ex jugador del Málaga que quiso volver en agosto pero al que no quiso Arnau (esta semana despedido), fue un dolor de cabeza para Baysse durante los 63 minutos que estuvo sobre el campo.
Tras el paso por vestuarios se vio a un Leganés desatado. Los diez primeros minutos fueron de escándalo, con un dominio aplastante sobre el Málaga, que no sabía cómo defender los ataques madrileños. El gol se veía llegar porque Roberto tuvo que realizar tres intervenciones de mérito. Y como el Leganés es uno de los conjuntos que más domina la estrategia, a la cuarta fue la vencida. Falta lateral, toque en el centro del área entre Luis Hernández y un delantero visitante y balón que llega a Gabriel, en el segundo palo, para marcar. González González dio validez al gol, pero Gabriel se encontraba en fuera de juego. Jugada complicada para el colegiado pero no tanto para su asistente. A partir de este momento más de lo mismo. El Málaga demostrando una impotencia absoluta, en ataque y en defensa. Sin plan de juego, sin orden, sin un faro que le guíe, con el conjunto deslabazado, dejando huecos y mostrando la misma pésima imagen de toda la temporada. Enfrente, un Leganés muy trabajado, con ideas, con un orden y, sobre todo, con mucho esfuerzo y estudio, tanto técnico como táctico. El segundo gol, de Szymanowski, fue la culminación de un trabajo coordinado y solidario. Hasta el final, poco más que le expulsión de Recio y la impotencia del Málaga, que se hunde en el fondo de la tabla por sus propios deméritos.
Parece que Míchel va a continuar, pero está claro que la plantilla ha perdido potencial y ahora mismo es un flan. No da para más y el panorama es desolador. Por su parte, el Leganés asciende hasta la sexta plaza, ya en puestos europeos, y demuestra que a base de lucha y esfuerzo los resultados llegan. El trabajo de Garitano es para quitarse el sombrero.
0 - Málaga: Roberto; Rosales, Luis Hernández, Baysse, (Cecchini, min. 84), Juankar; Mula (Ontiveros, min. 60), Kuzmanovic, Recio, Juanpi (Jony, min. 55); Peñaranda y Rolan.
2 - Leganés: Cuéllar; Zaldúa, Dos Santos, Siovas, R. García; El Zhar (Brasanac, min. 70), Rubén Pérez, Gabriel, Szymanowski; Eraso y Amrabat (Beauvue, min. 63).
Goles: 0-1, min. 55: Gabriel. 0-2, min. 77: Szymanowski.
Árbitro: González González, C. Castellano-leonés. Bien. Mostró tarjetas amarillas a Baysse y Rosales del Málaga y a Zaldúa, Siovas y Rubén Pérez del Leganés. Expulsó a Recio por dos tarjetas amarillas en el minuto 81.
Incidencias: Buena entrada en La Rosaleda, 23.951 espectadores.