El informe de la Intervención sobre Ribera Salud avala las prácticas de la empresa
El grupo Ribera Salud considera que el informe de la Intervención General sobre el control financiero de las concesiones sanitarias de 2003 a 2012 es «muy positivo» porque «avala las buenas prácticas» de los concesionarios de Alzira y Torrevieja.
Fuentes del grupo sanitario señalaron ayer que en el informe se insta a la Conselleria de Sanidad a que articule un «procedimiento claro y definido» para resolver «las liquidaciones anuales pendientes con las concesionarias, siguiendo los parámetros de la Conselleria anterior y ajustado al plazo que marca el pliego».
El pleno del Consell analizó ayer este informe que, según señaló la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, se resume en una «falta de fiscalización y control» del anterior Gobierno valenciano y en un «caos total».
Por su parte, desde Ribera Salud mostraron su satisfacción tras conocer el resultado del informe solicitado en noviembre de 2015 por el actual Consell para resolver cuestiones relacionadas con el control de las liquidaciones en el período 2002-2012.
Dos años después de la petición de este informe, la Intervención General ha emitido un documento concreto y definitivo que, según Ribera Salud, «avala que el órgano de contratación se ha ajustado a los pliegos en la confección de las liquidaciones anuales emitidas en la ejecución de los contratos de Torrevieja y Alzira».
Según el grupo sanitario, esta es «la principal conclusión que se puede leer en la página 7 del informe de 106 páginas que avala que las liquidaciones realizadas en el pasado entre Administración y concesionaria se han hecho adecuadamente».
Por ello, añadieron estas fuentes, «desmiente la acusación del actual Consell que ha cuestionado reiteradamente el procedimiento de control financiero realizado a las concesiones».