La OIEA respalda a Irán frente a las presiones de Washington
Irán recibió ayer el espaldarazo de la Organización Internacional de la Energía Atómica (OIEA) después de que su director, Yukiya Amano, confirmara en Teherán que el régimen de los ayatolás está cumpliendo el pacto nuclear. La visita del director general de la OIEA llega dos semanas después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, se negara a renovar el acuerdo firmado en 2015 entre Irán y el Grupo 5+1 (EE UU, Rusia, China, Francia, Reino Unido y Alemania). «Los compromisos nucleares adquiridos por Irán bajo el JCPOA [Plan Integral de Acción Conjunta] están siendo implementados», dijo Amano en una comparecencia.
El jefe de la OIEA recordó que el JCPOA es un acuerdo entre Irán y el Grupo 5+1, y que fue aprobado por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, por lo que pidió a todas las partes que cumplan con sus compromisos. Señaló también que la mayoría de los dirigentes mundiales apoyan el acuerdo y que «el cumplimiento de todas las partes de sus compromisos y obligaciones es crucial para la estabilidad y el futuro del JCPOA». Además, apostilló que el organismo que representa mantiene su «imparcialidad», algo que también le pidió el jefe de la Organización de Energía Atómica de Irán (OEAI), Ali Akbar Salehi.
Por su parte, el portavoz de la OIEA, Behruz Kamalvandi, exigió a Amano que no ceda ante las presiones políticas impuestas por Estados Unidos para vigilar bases militares iraníes. «No hay ninguna razón para que pidan acceder a otros lugares, sean o no militares», insistió Kamalvandi antes de aclarar que Washington «no puede exigir la inspección de ningún centro, base militar o espacio en el que no se realiza ningún actividad nuclear», ya que esto no es parte del JCPOA.
El Senado de EEUU pidió este pasado viernes a su embajadora ante la ONU, Nikki Haley, presionar a la OIEA para que supervise los centros «sospechosos» iraníes, incluso los militares, insistiendo en que el acuerdo nuclear entre Irán y el Sexteto no lo impide. Ante estas últimas exigencias de Washington, el presidente iraní, Hasan Rohani, pasó ayer al ataque, y respondió que seguirá fabricando misiles y que ningún país estará dispuesto a negociar con Estados Unidos tras su actitud respecto al acuerdo nuclear.
«Hemos fabricado, estamos fabricando y seguiremos fabricando misiles porque no violan ninguna de las leyes internacionales, ni siquiera la resolución 2231 del Consejo de Seguridad», subrayó en un discurso ante el Parlamento, en referencia a la petición de su homólogo estadounidense de que Teherán frene por un lado los programas armamentísticos y, por otro, que se renegocie el acuerdo nuclear para corregir sus «defectos».
El presidente iraní tildó de «ridículo» hablar de una renegociación del JCPOA porque Estados Unidos está «violando explícitamente» por su parte varios acuerdos anteriores y pactos aprobados por el Consejo de Seguridad. «Nosotros seguiremos con la defensa de nuestra seguridad nacional y sepan que cualquier violación a sus compromisos será perjudicial para ustedes, y la República Islámica de Irán les dará una respuesta determinante», advirtió.
El tema de las presiones de Washington ha levantado una ola de indignación en los distintos estamentos del país, que se sienten traicionados por Trump. En la víspera a la visita del jefe de la OIEA, el jefe del Ejército iraní, el general Ahmadreza Purdastan, advirtió en el mismo sentido de que Rohani de que «no se le permitirá a nadie ni a ningún país inspeccionar los centros militares». Sobre la posibilidad de que el programa de misiles del país persa se convierta en el centro de las negociaciones con Occidente, subrayó que el poder misilístico de Irán «no es negociable». El general de brigada manifestó que las autoridades persas le confirmaron que la República Islámica «nunca autorizará a otros a cruzar sus líneas rojas» en el contexto del pacto nuclear con el Grupo 5+1.