Laureles y Olivos para Fidel
Laureles y Olivos, la nueva canción de Raúl Torres dedicada a Fidel, fue presentada como una verdadera sorpresa para el público que el sábado 19 de noviembre estremeció a los asistentes al concierto Todo mi universo, en el Teatro Mella, en La Habana.
El tema, que ahora está en las manos del magistral músico César López, sus arreglos y el acompañamiento de la Orquesta Sinfónica Nacional de Cuba, representa ya un bello y poético homenaje al primer aniversario de la desaparición fisica del Comandante en Jefe.
El cantautor que diera vida a la hermosa letra de la canción aseguró que su inspiración fue espontánea y genuina: «Hasta ese momento era un poema musicalizado, que sorprendió tanto al público como a mí. Vibramos todos y hasta tuve que contenerme para poder terminar de cantar», relata el músico cubano, quien en aquella ocasión lo interpretó a guitarra limpia.
Para el autor de Cabalgando con Fidel, según las palabras que ofreciera al medio Cubadebate, la canción que fue himno en los días más sobrecogedores del luto de un país, no hay intelecto capaz de resumir en versos la dimensión de quien asaltó la Historia, «de reflejar hasta dónde llegó la obra de Fidel, por todas las cosas que se preocupó, cuánto abarcó nuestro líder histórico. Tenía un espíritu y un alma muy fuera de lo común», asevera.
Les dejamos a los lectores uno d elos fragmentos más cargados de lírica nostalgia:
A un año de ausencia, «mi viejo»
tu llama en el pecho es tan fuerte
que creo que soy una suerte de voz
con clara directriz.
Veré cómo crecen tus nietos,
les contaré tus historias, tus retos.
Pero me resulta difícil
contarles sin tu imagen tan pura
esculpida por manos, ternura,
en los parques al lado de Martí.
Contarles cómo el zambrán ceñía los sueños
Cómo tu gorra es un astro del cielo.