Las ofertas laborales falsas, el timo que sobrevive a la crisis
En tiempos de crisis económica, al ritmo que subían los índices de paro, crecía la pericia de quienes, a falta de escrúpulos, buscaban la manera de sacar rendimiento de la desesperación y la necesidad de otros. El de los aspirantes a ocupar la falsa vacante de cajero en Prymark no son casos aislados, ni mucho menos. Como estas víctimas de una estafa a través de una oferta fraudulenta publicada en la plataforma digital «CornerJob», son muchos los españoles que sufren este tipo de engaños. Así lo aseguraba hace tres días –aprovechando la celebración del Día Internacional de la Seguridad en Internet– Adecco, compañía líder a nivel mundial en gestión de recursos humanos, con la publicación de un informe que pone el foco en esta tendencia que, según afirman en el documento, está «consolidada y en auge». Por todo, Adecco ha observado el fenómeno para lanzar al público algunas cifras con la que ilustran la magnitud del problema y advierten a la población desempleada de los peligros a los que se exponen a diario en su búsqueda de un trabajo.
Los resultados de este estudio han sido recogidos en el último Informe Infoempleo Adecco, siendo su conclusión más reveladora la que se refiere a quienes se declaran víctimas de este tipo de fraude: «el 20,2 % de los desempleados españoles ha recibido alguna oferta laboral fraudulenta en la que le han solicitado el pago de una cantidad de dinero para entrar en un proceso de selección o para conseguir un empleo», reza el docmento.
La red, nido de trampas
El espacio virtual, por lo abstracto, es el mayor testigo de casos de fraude laboral como el denunciado el pasado lunes en Madrid. Ya en 2014, el Instituto Nacional de Ciberseguridad (Incibe) alertó de que uno de cada cuatro engaños en la red procedían de anuncios con falsas vacantes de empleo, y esto, según el análisis de los expertos, no desaparecerá a corto plazo. De hecho, tal y como anuncia la citada publicación, se ha detecado recientemente una nueva campaña masiva de ofertas laborales fraudulentas en la red.
Aún así, puede que el dato más preocupante que sacamos de este informe publicado por Adecco sea el que afirma que «un 12,4 % de los parados ha pagado o estaría dispuesto a hacerlo para conseguir un trabajo». Esto demuestra que, efectivamente, un sector de la sociedad es víctima potencial de los estafadores laborales que, además de dinero, buscan también información financiera o personal del candidato para posteriormente venderla a terceros.
Entrados ya en 2018, diez años después de que comenzara la crisis económica, cabría esperar que esta práctica estuviera disminuyendo, pero no es así ni parece que vaya a serlo mientras existan personas en busca de trabajo urgente. Por ello y hasta que se encuentre una vía para atajar el problema, Adecco recuerda que «no hay ofertas milagro» y llaman a desconfiar de aquéllas en las que se detalla el salario, así como en los procesos de selección que no exigen la entrega de un currículo detallado ni una entrevista personal.