La Síndic naranja
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Díganme una figura política actual valenciana con la que podamos identificarnos en el Partido Popular de la Comunidad Valenciana. Alguien que haya dado la cara en el ayuntamiento o en el parlamento autonómico, sólo uno. No lo van a encontrar. El PPCV no ha hecho los deberes en dos años, y nosotros los valencianos, hemos tenido que depositar la esperanza en personas y no en partidos. Hemos estado desamparados totalmente mientras los gobiernos locales tripartitos y el de la Generalitat, han ido cometiendo fechorías de toda índole, con una oposición que ha estado callada, ausente o noqueada.
Imagen de Mari Carmen Sánchez tomada en las Cortes Valencianas
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MIKEL PONCE
El bloque constitucionalista de nuestra región, ha carecido de líder con una voluntad política clara e ilusionante hasta escasos días cuando Mari Carmen Sánchez ha tenido que enarbolar la bandera de la sensatez y de la firmeza. Cierto es que si ella empieza, además de denunciar la corrupción, a alzarse también contra el pancatalanismo en la escuela y demuestra determinación y no ambigüedad como su formación política en Madrid, en ciertos temas sensibles como el la memoria “histérica”, tendremos alcaldesa o presidente para rato. Pues en política algunas carreras brillantes se inician así, por casualidad sin el anhelo legítimo del poder, sin buscar nada, es el pueblo el que escoge a una persona incluso antes que las urnas y esa persona debe responder al desafío, una vez elegida antes y después de los comicios. Ahí nace un liderazgo sin fisuras con un apoyo popular impresionante.
Como la primera película de Star Wars -las míticas- Una nueva esperanza, Mari Carmen Sánchez se ha convertido en la promesa a este tan castigado pueblo valenciano que sufre día tras día la sinrazón de Compromís, PSPV y Podemos. Es Mari Carmen Sánchez la que más llega a jóvenes y no tan jóvenes, los asesores de C´s deberían asumirlo ya. ¿Le dará su partido la oportunidad de representarnos y defendernos? Esperemos, el tiempo apremia.