Los agricultores esperan soluciones tras la salida de Álvaro
Ana G. Andrés - Una semana después de la destitución del que fuera secretario autonómico de Medio Ambiente, Julià Álvaro, el sector agrario se muestra esperanzado con que la entrada de su sustituto, Fran Quesada, suponga el desbloqueo de algunos asuntos que el primero mantenía en «stand-by» desde hacía meses y que habían sido motivo de serios conflictos dentro del mundo agrario.
Tanto el vicepresidente de la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA) y presidente de la sectorial del arroz de la misma organización, Miguel Mínguez, como el secretario general de La Unió de Llauradors, Ramon Mampel, aseguraron ayer que han solicitado ya reunirse con Quesada, aunque por el momento no han obtenido respuesta.
Ambos representantes agrarios mostraron su confianza en que el predecesor de Álvaro se muestre más abierto a encontrar soluciones a los problemas generados en el sector. «¿Quién es más ecologista que un agricultor o un ganadero?», se preguntaba Mampel en alusión a las prohibiciones impuestas por el ex secretario general en nombre de la protección al medio ambiente, pero que ocasionaba perjuicios a los productores en el campo.
El ejemplo más claro es el de la quema de los restos agrícolas. Los agricultores mostraron la necesidad de eliminar los rastrojos mediante esta práctica controlada, mientras que Álvaro, con un fuerte carácter ecologista, se opuso y prohibió hacerlo. En vista del grave problema ocasionado al sector, finalmente cedió en algunos aspectos y propuso una especie de solución que «no satisfizo a nadie», tal y como señala Mínguez, quien urgió a sentarse de manera inmediata con Quesada para abordar este asunto, y no esperar a septiembre, cuando se volverá a plantear el mismo problema.
Mampel, por su parte, recordó que en la Comunitat Valenciana se tarda dos años en conceder el informe de impacto ambiental para las granjas de animales del interior, lo cual ocasiona serios contratiempos a los ganaderos. «Hay empresas que se están yendo a otras regiones donde el trámite dura la mitad de tiempo. Estamos perdiendo puestos de trabajo», señaló e instó al sustituto de Álvaro a dinamizar la concesión de estos permisos.
Los daños producidos por la avifauna en los campos, debido al descontrol que existe en la fauna salvaje, así como la pérdida de ganados que mantengan en buenas condiciones la vegetación y creen barreras cortafuegos, son otros de los asuntos que preocupan a los productores y que deberán abordar con el nuevo responsable de la Conselleria.
«Esperamos que el equipo de Julià, que ya nos conoce, nos acompañe en las primeras reuniones», aseguraba Mampel, quien, como Mínguez, destacaron la accesibilidad que siempre mostró Àlvaro.
Político y ecologista, pero menos polémico
Hasta ser nombrado sustituto de Álvaro, el nuevo secretario autonómico de Medio Ambiente, era concejal de Compromís en Ontinyent. Perteneciente también a la vertiente ecologista, con él se mantiene esta cuota en el Pacte del Botànic, aunque, se espera, con menos polémica.