Ana Julia mató a Gabriel una hora después de secuestrarlo
Ana Julia Quezada acabó con la vida de Gabriel Cruz una hora después de secuestrarlo en la pedanía almeriense de Las Hortichuelas (Níjar). Así lo desvela la ampliación del informe forense que hoy publica "La Voz de Almería". Según los especialistas del Instituto de Toxicología de Sevilla, el pequeño murió asfixiado entre "una y dos horas" después de comer en la casa de su abuela. La información ya está en manos del titular del Juzgado de Instrucción número 5 de Almería, Rafael Soriano. El informe corrobora así el resultado de la autopsia realizada a Gabriel Cruz en el Instituto de Medicina Legal de Almería, que concluyó que el menor, de 8 años, fue asesinado el día de su desaparición. Así, el menor habría muerto incluso antes de que sus padres denunciaran su desaparición.
Gabriel Cruz salió de casa de su abuela sobre las 15:30 horas del 27 de febrero en dirección a casa de unos amigos, situada a unos 150 metros de la casa de su abuela, donde comió junto a Ana Julia Quezada, novia de su padre. Ana Julia abandonó el domicilio pocos minutos después, secuestró a Gabriel y acabó con la vida del menor asfixiándolo. Después, escondió el cadáver en una finca familiar. El día 11 de marzo, Ana Julia, regresó a la finca para cambiar el cuerpo de sitio después de que los investigadores le hicieran creer que sabían dónde estaba. Ana Julia, presionada, cometió un error y los agentes estaban vigilándola. Poco después, fue detenida a la entrada del garaje de su casa con el cuerpo de Gabriel en el maletero.
Ana Julia reconoció que había matado a Gabriel, pero indicó que fue de manera accidental. Según su relato, se encontraba pintando las paredes del edificio ubicado en la finca cuando Gabriel la amenazó con un hacha. Ella se la arrebató y al intentar defenderse acabó con su vida.
Ana Julia permanece en prisión desde el pasado 16 de marzo, acusada de detención ilegal, asesinato y contra la integridad moral.