Las 'heridas de guerra' de la reina Letizia
La reina Letizia no sale de una cuando parece que está metida en otra. Este jueves tenía nada menos que compartir protagonismo con la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, durante la entrega de los Premios Barco de Vapor y Gran Angular, y por si no hubiera tenido bastante ya con eso de fotografiarse con una de las mujeres más criticadas en los últimos tiempos, por su célebre Máster, las cámaras la han sacado algún defecto más.
La mujer de Felipe VI, que ya no mira igual a la infanta Cristina desde que se destapara el Caso Noos, no tuvo otra que tragar esta vez con la presidenta de la Comunidad de Madrid, que bastante tiene con tratar de cumplir con su agenda a pesar de su delicada posición tras el escándalo que protagoniza, quizás porque ella ahora mismo, después del incidente de Palma, tampoco está para tirar cohetes en cuanto a popularidad, pero lo que no sospechaba era que el lucir una sonrisa de oreja a oreja la iba a pasar factura.
Doña Letizia optó por un mono tipo esmoquin de Hugo Boss que ya usó en 2016, al que acompañó con unos 'mules' azules de alto tacón y decorados con piedras negras en el empeine, creación de la firma Magrit, una de sus preferidas, y con unos pendientes de Bulgari. Cifuentes compitió con un conjunto de dos piezas de chaqueta y falda en tono verde pistacho, pero al final no primaron tanto las vestimentas como la ceja izquierda de la Reina, y la parte lateral que la rodea, hacia la frente, que presentaba una irregularidad.
Los objetivos de las cámaras captaron arrugas resaltadas por el color azulado de varias venas que sobresalían por encima del maquillaje. La coloración de la piel cambia pasando a ser del pálido a un tono más oscuro, como si hubiera llevado antes una especie de apósito, tirita o venda en la zona.
Aunque este curioso detalle en su ceja podría deberse a un efecto de la luz en la imagen, algunas voces ya han señalado que también podría ser propio de algún tipo de secuela debido a un retoque estético. En este terreno hay que recordar que son muchos los profesionales del sector que han asegurado que Doña Letizia se ha inyectado bótox en la cola de la ceja y el ceño, así como rellenos de ácido hialurónico en mentón, pómulos y labios, algo muy distinto a este retoque en el lateral de la frente.