novedosas aplicaciones que buscan solucionar los problemas a los que se enfrentan los ciudadanos cada día. Para solucionar los problemas de movilidad se avanza a pasos agigantados hacia el coche autónomo. Numerosos sistemas de seguridad y ayuda a la conducción son ya una realidad. Al igual que está presente en numerosos modelos la posibilidad de abrir y arrancar el coche sin necesidad de una «llave física». Las tradicionales llaves de los vehículos están en camino de extinguirse ante la llegada de la primera versión de la Digital Key presentada por el consorcio de fabricantes de vehículos y de dispositivos tecnológicos Car Connectivity Consortium (CCC). El teléfono móvil se convierte en el auténtico protagonista del futuro.
El consorcio ha distribuido su estándar entre empresas como Audi, BMW y Volkswagen, y otras compañías tecnológicas del sector como Gemalto, GlobalPlatform, NFC Forum y NXP.
Por otro lado, CCC señala que este dispositivo permite la posibilidad de transferir de manera segura la clave inteligente a otro smartphone gracias a la infraestructura ya existente de Trusted Service Manager (TSM) y el límite de distancia de NFC para garantizar un nivel de seguridad avanzado.
No obstante, la entidad ya está trabajando en el desarrollo de la versión 2.0 de Digital Key para que salga al mercado en 2019, con el apoyo de Audi, BMW, General Motors, Hyundai, Volkswagen, Apple, LG Electronics, Panasonic, Samsung y Qualcomm.
Esta versión ofrecerá un protocolo de autenticación estandarizado entre el automóvil y el dispositivo, así como una solución adaptable a las distintas modalidades de vehículos para reducir los costes de desarrollo de las marcas que quieran implementar la llave digital y su conectividad con diferentes dispositivos inteligentes.
También la compañía Bosch ha desarrollado su sistema denominado «Perfectly Keyless». «Es un sistema digital de acceso a vehículos que permitirá a los conductores prescindir de las llaves físicas del coche», explica Harald Kröger, presidente de la división Bosch Automotive Electronics.
A medida que los conductores se acercan a sus vehículos, sus smartphones son identificados por los sensores de a bordo. «Una vez que esta identificación se ha producido, el vehículo se desbloquea sin necesidad de una llave física. Del mismo modo, no se necesita ninguna llave para arrancar el motor o para bloquear el coche de nuevo al final de un viaje», dice Kröger. Los propietarios también pueden usar una aplicación para autorizar a otros conductores a usar sus vehículos. En un proceso seguro, que está protegido contra el acceso no autorizado, se enviará una clave virtual adicional a través de la nube a otros smartphones. Esto permitirá a los proveedores de servicios de coches compartidos y a los operadores de flotas de vehículos gestionar el acceso y las claves con flexibilidad.
Cuando el conductor sale del coche al terminar el trayecto, el sistema sigue manteniendo un ojo virtual en el smartphone. Una vez que el conductor y el móvil se hayan alejado más de dos metros del vehículo, éste se bloquea automáticamente de forma segura. El sistema envía una confirmación al smartphone del conductor informándole de la operación.
Cómo funcionan estos sistemas
Los fabricantes de automóviles tendrán que instalar en sus vehículos sensores de proximidad y una unidad de control. Estos sensores miden la distancia entre el smartphone del conductor y el coche. También registran en qué dirección se está acercando el conductor. La unidad de control administra la clave de seguridad digital y asegura que los smartphones, la nube y los sistemas del vehículo se comuniquen sin problemas.
Si el smartphone se pierde, y la aplicación con él, la clave digital se puede desactivar online. Esto bloquea el acceso al vehículo, tanto para las personas autorizadas como para terceros. Un nuevo smartphone se puede conectar con el vehículo en cualquier momento, y generar una nueva clave de seguridad única. Entre tanto, la llave física del vehículo funcionará como de costumbre.