Feijóo rescata Cultura y da entrada a tres nuevos conselleiros en su equipo
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Fiel a su estilo, Feijóo eligió un momento insospechado para comunicar la crisis de su equipo más longevo desde que aterrizó en el poder en 2009. Pocas horas después de someterse a la sesión de control en el Parlamento, la Xunta anunció la incorporación de Fabiola García como nueva conselleria de Política Social, de José González como titular de Medio Rural y de Carmen Pomar como responsable de Educación, Ordenación Universitaria y FP. Tras la firma del preceptivo decreto, este jueves los tres tomarán posesión en el salón noble del Pazo de Raxoi y se estrenarán en su primera reunión del Consello.
Una directora xeral premiada con un ascenso, un diputado bregado en la materia y una independiente de prestigio. El resumen valdría para glosar a los tres fichajes del presidente. Pomar, un perfil técnico, profesora de Psicología de la USC, dará el relevo a Román Rodríguez, de quien recibió ayer todo tipo de elogios: «Es una referencia en el sector educativo, va a desarrollar sus responsabilidades manteniendo los niveles de excelencia, de calidad y de equidad que da nuestro sistema educativo», resaltó nada más conocer la noticia de los cambios.
Rodríguez cederá las competencias en Educación pero a cambio asumirá Turismo, un área tutelada a diario por la agencia que dirige Nava Castro y que dependía orgánicamente de la Presidencia.La Xunta tiene entre ceja y ceja el Año Santo, su proyección en cuanto a la marca Galicia, y la recuperación de la Consellería de Cultura es un paso en esa dirección.
La entrada de José González en Medio Rural también desencadena algunos corrimientos internos. Inspector de Hacienda, portavoz del ramo en el grupo parlamentario del PPdeG, muy apreciado por su papel en la reciente comisión de política forestal, este orensano recogerá el testigo de Ángeles Vázquez. La melidense pasará a su vez a sustituir el vacío que deja Beatriz Mato al frente de Medio Ambiente.
Por su parte, el ascenso de Fabiola García a la cúspide de Política Social es el movimiento político más natural. Desde 2016 ejercía como directora xeral de Maiores e Persoas con Discapacidade como subalterna de José Manuel Rey Varela, el penúltimo escalafón de una carrera política que comenzó como asesora en varias consellerías y que continuó como primera teniente de alcalde en el Ayuntamiento de Ribeira.
La última pincelada de la remodelación la protagonizan Medio Ambiente e Infraestructuras. El suyo será un intercambio bidireccional de competencias. La primera recibirá las atribuciones en Vivenda, y la segunda el mando sobre Augas de Galicia, antigua estación de paso de la conselleira Ethel Vázquez. Su negociado, además de asumir la fiscalización de los últimos coletazos en las obras del AVE o la construcción de las intermodales, incorporará a su nombre el apéndice de la «Mobilidade»: un gesto que simboliza la apuesta de la Xunta por la reordenación del transporte por carretera.
Por lo demás, el resto de conselleiros se mantienen en sus puestos. Con Rueda como vicepresidente en solitario —el único, junto con Rosa Quintana, que se mantiene desde 2009— la remodelación tampoco ofrece pistas sobre un posible, aunque muy lejano, debate sucesorio.
Reacciones de la oposición
Mientras, los partidos de la oposición lamentaron que Feijóo no aprovechara la salida de Mato y Rey Varela para acometer cambios más profundos en su equipo con el objetivo de poner en marcha un «cambio de políticas». Según los líderes de En Marea, PSdeG y BNG, la remodelación en el seno de la Xunta se reduce a un «sudoku» y un «cambio de cromos» que no permitirá solucionar «los problemas de la Galicia real». Por su parte, el secretario general del PPdeG, Miguel Tellado, valoró positivamente los cambios implementados por Alberto Núñez Feijóo al entender que responden a un «nuevo tiempo político» en el que la consolidación de la recuperación económica permite ampliar el número de miembros del Ejecutivo autonómico.
En los pasillos del Parlamento gallego, el portavoz de En Marea aseguró que el cambio de área de la hasta ahora titular de Medio Rural, Ángeles Vázquez, así como el desdoblamiento de los departamentos de Educación y Cultura muestran el «fracaso» de las políticas de la Xunta en estas materias. Además, Luís Villares censuró que Feijóo no ordenase el «cese fulminante» del conselleiro de Sanidade, al que señaló como «responsable» del fallecimiento de un hombre en el PAC de A Estrada.
En la misma línea, el líder del PSdeG, Gonzalo Caballero, criticó que los relevos en el Gobierno gallego se han realizado «en función de los intereses electorales» del PP, con el objetivo de «salvar los muebles» en las próximas elecciones autonómicas. Una idea en la que incidió la portavoz nacional del BNG, Ana Pontón, que consideró que tanto Mato como Rey Varela han usado la Xunta «para hacer campaña electoral» durante meses.
«Creemos que actúan de forma responsable dejando el Gobierno. Podrían seguir hasta el último día, es legal, pero actuamos con responsabilidad», respondió Miguel Tellado, al tiempo que aludió al caso de Martiño Noriega, que según el popular llegó a compaginar su papel como regidor de Teo con el de candidato a la alcaldía de Santiago por Compostela Aberta. Por último, el secretario general del PPdeG defendió la gestión «excepcional» de Ángeles Vázquez y Román Rodríguez durante estos años y señaló que, muestra de ese «buen trabajo», es que seguirán en el Ejecutivo autonómico.