Las leyendas del rock & roll regresaron al Auditorio Telmex para despedirse de los escenarios con “Juntos por última vez”, un emotivo concierto que conquistó por segunda vez al público tapatío con un amplio repertorio que se extendió por casi cuatro horas.
Pasaron poco más de seis meses tras su última participación en Guadalajara cuando el cuarteto abarrotó el mismo recinto donde ofreció una noche inolvidable, sin embargo, el público jalisciense pidió repetir la experiencia y fue anoche cuando la velada brilló a cargo de las cuatro voces que enamoraron a toda una generación.
Minutos después de las 21:00 horas, las luces se apagaron y las más de 5 mil personas que se habían dado cita en el recinto ovacionaron la salida de Enrique Guzmán, Angélica María, César Costa y Alberto Vázquez, siendo él quien se quedaría en el escenario para dar inicio con el nostálgico recital.
El cantante entregó una nutrida lista de temas que abarcó desde “El pecador” a “Sixteen Tons”. Entre risas y anécdotas, el también actor señaló a los impuntuales quienes aseguró, se perderían de algo muy bueno.
Sentado, de buen humor y con una gran voz fue como el intérprete se lució frente al público con el que mantuvo constante interacción. Así llegó el momento en el que el cantante se dirigió a su hijo Juan Alberto Vázquez “Coco”, a quien invitó a subir al escenario. El niño sorprendió y se robó los corazones jaliscienses.
Tras cuarenta minutos y una ovación de pie, Alberto Vázquez se despidió del escenario y después llegó César Costa, quien comenzó su repertorio con “Diana”.
“Qué gusto de compartir con todos ustedes esta noche llena de música, de magia, recuerdos y mucha nostalgia” dijo el cantante antes de continuar con “La historia de Tommy”.
Con simpatía y pasos de baile, César Costa comenzó a entonar “Besos por teléfono” mientras bajaba del escenario. Las afortunadas mujeres que tuvieron oportunidad de acercarse con el cantante brincaron y gritaron de felicidad por haber obtenido una fotografía con su ídolo.
Luego continuó con un homenaje a los grandes años del rock entre bromas, baile y curiosos cambios de vestuario, no sin antes homenajear a José Alfredo Jiménez con “El Rey” y el éxito de Frank Sinatra “My Way” con el que se ganó la ovación de pie.
Luego fue turno para Angélica María para salir al escenario con “Vivaracho”. Presumiendo un elegante atuendo negro, la cantante mostró actitud y fiebre rock desde su primer tema.
“Ay qué gusto estar otra vez aquí en Jalisco. Gracias por siempre darme tanto amor, hay gente de Atotonilco, Nayarit, de toda la República para venir a este show” dijo Angélica para saludar al público.
La sencilla producción y el modesto juego de luces fue más que suficiente para que el concierto hiciera destacar las voces y personalidades de cada uno de los protagonistas.
Tras casi tres horas de espectáculo, todavía faltaba la actuación del esperado Enrique Guzmán, quien por fin apareció en el escenario rayando los primeros minutos de este domingo para deleitar con un emotivo y enérgico repertorio de clásicos del rock&roll.
El concierto continuó hasta las 01:00 horas y los más de 5 mil asistentes se despidieron del grupo de amigos con un prolongado aplauso y sonrisas por la noche retro que se les había entregado.
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