Las claves de la derrota de España en Croacia

España empezó como un tiro la era Luis Enrique, ganando en Wembley (1-2) a Inglaterra y goleando a Croacia en Elche (6-0), pero enlaza dos derrotas que le obligan a reflexionar, sobre todo la de este jueves en Zagreb. Ahora necesita que británicos y balcánicos empaten el domingo en Wembley para acceder a la final a cuatro de la Liga de las Naciones, pero mientras debe trabajar en una serie de aspectos importantes. Agujero en la portería Es cierto que De Gea hizo dos buenas paradas ante Croacia, pero sigue siendo un lastre para el equipo. No sale de su portería y no transmite confianza, señalado desde el Mundial de Rusia e igualmente mal en estos encuentros. Nadie se explica lo que pasa con el meta del United, pero desde luego que es un problema serio para el equipo. Defensa desajustada No solo De Gea es un problema, pues tampoco la defensa está como para tirar cohetes. Entran y salen jugadores, solo con Ramos como hombre fijo, pero la realidad es que ha concedido seis tantos en los dos últimos duelos. La defensa fue una de las claves de este equipo cuando se celebraba casi todo. Ahora concede muchísima vida al rival. Un centro del campo plano Contra Croacia, España tuvo durante buena parte el control, pero jugó sin brillo y abusando del pase en horizontal. Falta lucidez y tampoco abundan las ideas, con Busquets demasiado perdido a la hora de recuperar. Saúl ha bajado muchísimo y Ceballos no se esconde, pero tampoco arriesga más de la cuenta. Delantero por descifrar Rodrigo es el delantero de Luis Enrique, que también apuesta con frecuencia por Iago Aspas, pero falta contundencia en ataque. El debate del 9 es muy antiguo, pero sigue más vivo que nunca. Están las opciones de Morata y Alcácer, y el asturiano sigue probando porque ninguno da un golpe definitivo. En Croacia estuvieron poco inspirados. Complementos por estallar Falta también que jugadores como Asensio den un salto. Se les presupone mucha calidad, y deben asumir responsabilidad por mucho que apunten a los veteranos. De todos modos, es verdad que la selección tiene fondo de armario, pero hay una diferencia importante entre los titulares y los reservas.