El príncipe heredero saudí pidió «silenciar» a Khashoggi

El caso Khasoggi se ha converti­do en una especie de culebrón por entregas que discurre entre las filtraciones anónimas que obtiene la prensa y las declaraciones oficiales por parte de los protagonistas implicados. Las primeras fueron las que anunciaron que el periodista fue asesinado de forma brutal en el consulado de Arabia Saudí en Estambul el pasado 2 de octubre y poco a poco estrechan el cerco ahora sobre Mohamed Bin Salmán (MBS), príncipe heredero al que apuntan todas las miradas como instigador de la operación. Es un proceso lento y con muchas aristas, ya que el joven MBS es la persona de confianza de Estados Unidos y de Israel en el Golfo y las autoridades saudíes han calificado de «línea roja» cualquier acusación contra su persona. La Agencia de Inteligencia estadounidense (CIA) fue la última en sumarse a la presión sobre el príncipe ya que, según el diario turco Hurriyet, dispone de una grabación en la que el heredero dio instrucciones de «silenciar a Khasoggi cuanto antes».


Hurriyet informó de que MBS llamó a su hermano menor Khaled, embajador saudí en Washington, para darle este mensaje sobre un periodista que era una de las voces críticas con la casa real. En la conversación los hermanos destacaron la incomodidad que les producía leer sus comentarios de opinión en The Washington Post. El diario turco aseguró que la directora de la CIA, Gina Haspel, reveló la existencia de esta grabación a las autoridades turcas durante su reciente visita a Ankara. The Washington Post recordó que la CIA dispone también de otra grabación en la que el príncipe Khaled asegura a Khasoggi que puede ir al consulado de Estambul «sin riesgo» para efectuar el trámite que necesitaba para sellar el divorcio de su primera esposa. El diplomático negó la existencia de esta llamada.


Viaje al G20
Esta nueva filtración salió a la luz el mismo día en el que MBS inició una gira por el extranjero, su primera salida del reino desde que estalló el escándalo Khasoggi. No se hizo pública la agenda con los países que recorrerá el heredero, pero sí se adelantó que viajará a Argentina para asistir a la cumbre del G20 los próximos 30 de noviembre y 1 de diciembre.


Pasan las semanas y el cuerpo del periodista siguen sin aparecer. Sus amigos más cercanos celebraron un funeral el viernes pasado en Estambul. Allí le dieron un último adiós simbólico y protestaron contra la decisión de la Justicia saudí, que pidió la pena de muerte contra cinco de los sospechosos de estar vinculados con el crimen, pero eximió de cualquier vinculación con el caso a MBS. Donald Trump también quiso pasar página cuanto antes y absolvió a Arabia Saudí del asesinato. El presidente estadounidense confirmó que su país no adoptará castigo alguno contra su gran aliado y a la pregunta de quién debería entonces rendir cuentas por el crimen, respondió que «quizás el mundo», porque «es un lugar muy salvaje».