De verdad quiero creer

De verdad quiero creer que hay un rumbo en el país, pero desde antes de arrancar este gobierno el ruido se hizo presente.

Primero con la famosa consulta sobre el Nuevo Aeropuerto Internacional de México, se vendió la idea de que era parte de la lucha contra la corrupción, pocos argumentos técnicos sustentaban la decisión de cancelar la obra y otros tantos de llevar el proyecto a la base aérea de Santa Lucía, hoy ni uno ni otro asunto se volvieron a tocar.

Y es que apenas empezaba a agarrar fuerza el tema, cuando brincó el asunto de la iniciativa para retirar a los bancos la posibilidad de cobrar comisiones, al final se rechazó la iniciativa luego de una breve sacudida de los mercados mexicanos y del tipo de cambio.

Pasamos de ahí a la consulta del tren maya, que casualmente salió a favor del proyecto (¿qué pensar de la consulta popular?) y luego brincamos al tema de la Guardia Nacional y cuando apenas empezábamos a asimilar la militarización de la seguridad pública justo en ese entonces viene el tema del desabasto de combustible.

Hoy el racionamiento de la gasolina en el país es el tema número uno en la agenda pública, de noche pasó la posible caída en las importaciones de combustible, hoy el gobierno mexicano ha dejado de importar al menos las cantidades que solía pues el cierre de ductos impedía el llenado de las terminales de abasto y distribución. De verdad quisiera creer que hay rumbo que hay estrategia y que tiene sentido todo esto.

La tragedia de Tlahuelilpan, Hidalgo, vino a enrarecer aún más el ambiente, más de 100 víctimas ya, que nos subrayan que el problema toral hoy es el huachicol, la violencia no cesa, los grupos criminales siguen operando sin ser molestados hoy no se habla de un solo detenido importante del crimen organizado ¿qué pasa?

De noche pasó el nombramiento del Fiscal General de la República, la agenda está ocupada por el abasto de gasolina y el robo de combustible que no cesa. Hoy se están perdiendo millones de pesos por el bloqueo a las vías del ferrocarril en Michoacán y ayer la Industria Farmacéutica (Canifarma), advirtió sobre el posible desabasto de medicamentos en el país por la falta de permisos de importación ¡desde hace 45 días!

De verdad quiero creer que hay rumbo en el país.

miguel.puertolas@milenio.com