¿Luchará el PSOE contra el adoctrinamiento escolar? Responde que «no»
La defensa del castellano como lengua cooficial, la necesidad de combatir el adoctrinamiento en las aulas o de establecer una misma reválida en la ESO, común para todas las comunidades autónomas, son algunas de las iniciativas que el PP, Cs y Vox están dispuestos a tirar hacia adelante en el ámbito educativo si salen victoriosos en las urnas el próximo 28 de abril.
Según una encuesta realizada por el sindicato de profesores AMES entre las principales fuerzas políticas que se presentan a las elecciones generales (PP, Cs, PSOE, Vox y Podemos) -este último partido, según señala el sindicato, no había enviado sus respuestas al cerrar los resultados-, los tres grandes partidos de la derecha (PP, Cs y Vox) coinciden al apuntar algunas de las reformas que deberían, a su entender, emprenderse en el actual sistema educativo. En cuanto a la cuestión de la lengua, un aspecto crucial sobre todo en comunidades como Cataluña, donde impera un sistema de inmersión lingüística en catalán y se ha denunciado durante años la «discriminación del castellano», las tres fuerzas señalan en sus respuestas, a las que ha tenido acceso ABC, la necesidad de respetar el derecho de los padres a elegir la lengua de escolarización de sus hijos en las etapas de Infantil y Primaria.
El PSOE, por contra, apunta que «no» y afirma que «se debe garantizar el aprendizaje en castellano a todo el alumnado en todo el territorio. Además, donde haya lengua cooficial su enseñanza debe ser también garantizada, sin perjuicio del castellano». No obstante, según AMES, «no explica cómo garantizar ese aprendizaje en castellano». Respecto a que en las comunidades bilingües, durante la etapa de secundaria, se impartan otras asignaturas en la otra lengua cooficial, todos los partidos se muestran a favor. Con respecto a la cuestión del adoctrinamiento, PP, Cs Y Vox se declaran partidarios de que en los centros educativos se prohíba transmitir al alumnado ideas políticas que no son compatibles con la Constitución Española o con el Estatuto de Autonomía y que «solo son defendidas por unos determinados partidos». El partido socialista, por su parte, se abstiene de contestar porque, a su entender, «la actual legislación ya es suficientemente garantista para preservar los derechos de la infancia y el no adoctrinamiento». Vox, por su parte, aboga por establecer un «pin parental», que definen como «la necesidad de una autorización de los padres, previa a cualquier charla, taller o actividad que pueda resultar intrusiva a la conciencia y la intimidad de sus hijos».
Corregida desde el Ministerio
También se alinean en la misma posición los tres partidos respecto a la necesidad de fijar una misma reválida para todas las comunidades al final de la ESO, que sería corregida por profesorado dependiente del Ministerio de Educación. El PSOE se opone y asegura que una sola prueba «implicaría una recentralización y sobre-estandarización del sistema que iría a contracorriente de la eficiencia y de la equidad».
Ciudadanos sí se muestra partidario de las pruebas censales pero rechaza que «tengan carácter académico». Las fuerzas de derecha defienden también una prueba única de selectividad en todo el territorio español, mientas que el PSOE «no lo cree eficaz ni imprescindible».