Pilar Landeira nunca hizo de su trabajo, árbitra de baloncesto, una reivindicación feminista. Bastaba con plantarse en la pista y hacer lo que había aprendido a hacer: decidir las jugadas conflictivas. Que fuera la primera mujer en llegar a pitar un partido de la ACB fue una consecuencia, no un fin en sí mismo. Sin embargo, para muchas otras mujeres fue una fuente de inspiración y un espejo en el que volcar las expectativas de futuro.
Muchas han seguido su camino, tanto en baloncesto, como en fútbol, o en cualquier deporte. Читать дальше...