El Corte Inglés incluirá como tiempo de trabajo las pausas del café y del cigarro

El Corte Inglés incluirá como horas de trabajo efectivo las pausas de menos de una hora que los trabajadores realicen. Por ejemplo, las paradas para tomar un café o salir a fumar un cigarro se excluirán del registro de la jornada horaria. Así lo han acordado hoy la empresa y los principales sindicatos de la compañía (Fetico, CCOO, Fasga y UGT), tal y como ha anunciado Fetico en un comunicado. Este acuerdo afecta a todos los empleados del grupo, incluidos los mandos y direcciones. En total, El Corte Inglés cuenta con más de 92.000 empleados. En concreto, el sindicato explica que «la plantilla en su totalidad deberá fichar» y que «se contabilizará como jornada efectiva los descansos de cortesía, fumar, etc.». Aunque la Inspección de Trabajo y Seguridad Social para aclarar las numerosas dudas surgidas con la implantación del registro horario estipuló que estas pausas serían «convenientes» registrarla. Aun así, no existe obligatoriedad expresa como tal, de ahí la decisión de la compañía presidida por Nuño de la Rosa. Así, solo aquellas pausas de más de una hora no serán contabilizadas como trabajo efectivo. Además, el sindicato explica que hay otras empresas del sector, como Ikea o Leroy Merlin, que tienen intención de formalizar un acuerdo similar. Según el sindicato, en la empresa ya se venía registrando la jornada de forma «eficiente», pero ahora se han implementado nuevos mecanismos de consulta tanto de los trabajadores a nivel particular como de los sindicatos para establecer una «perfecta transparencia» del tiempo efectivo de trabajo. La nueva norma, aprobada el pasado 12 de mayo mediante real decreto, se ha convertido según Pérez en el «quebradero de cabeza de muchas empresas», y en «la reforma laboral más transversal e importante de los últimos 20 años». Esta nueva norma plantea a las empresas definir qué es tiempo de trabajo y pone «en tela de juicio» como tiempo efectivo los descansos de cortesía, los cigarros, partidos de fútbol con clientes o viajes al extranjero, ha afirmado Pérez, que considera que la presión de la Inspección de Trabajo «está sacando los colores a muchas empresas».