Freddie y el tiempo
Hace unos días me encontraba impactada por el descaro de una disquera, Universal, por decir que estaban lanzando una canción totalmente inédita, jamás antes escuchada con la maravillosa voz de Freddie Mercury. Mi impresión venía del hecho de que esa canción, Time, yo me la sabía de memoria desde principios de los años 90, porque era parte del disco de Freddie como solista donde también podemos escuchar maravillas como su versión de “The Great Pretender”, de Los Platters (los originales, ni le entremos a esa).
Bueno, pues ¿quién mejor que Brian May, el astrofísico su compañero en Queen, para aclarar las cosas. Y es una historia aún más interesante que las meras ganas de sacar provecho de algo que está de moda. Porque queda cada día más claro que Queen puede ser descubierto una y otra vez por las nuevas generaciones: pero ya es mucho más que una moda.
Dave Clark, uno de los mejores amigos de Freddie y también un gran músico de la invasión británica, en 1986 hizo un musical llamado Time. Como ocurrió con Tommy The Who, y ahora con Hamilton algunos de los grandes musicales tienen su versión escénica y otra como álbum conceptual. Muchas veces en el disco se invita a otros artistas a reinterpretar los temas y se vuelve otro viaje artístico en sí. Pues ese fue el caso, según nos recordó May en Instagram, con la canción que originalmente conocíamos como “Time, Waits For Nobody”.
Brian narra: “Freddie, siendo Freddie, no podía hacer las cosas a medias . Se metió de lleno e hizo una gran producción de lo que hubiese sido una canción sin particular presencia, decidido en convertirla en algo épico para todos los tiempos. La producción tenía enormes orquestaciones, grandes participaciones vocales y el video original lo tenía a él interactuando, solo visualmente, con el elenco del musical”.
Sigue explicando que lo que ahora lanzaron —que nada tiene que ver con él ni con Queen— ya no tiene esos elementos, pero sí algo maravilloso a su favor, y es que el mismo Dave Clark tomó las grabaciones originales y solo dejó la gloriosa voz de Freddie con un sencillo piano de fondo.
May le desea lo mejor a esta producción, señalando que aunque a ellos no les toca para nada, Dave Clark es un buen hombre y el mundo entero tiene un interminable apetito por cualquier cosa que tenga que ver con Freddie. Pero se agradece mucho el contexto, porque una de las cosas maravillosas de Bohemian Rhapsody es que nos muestra cuánta historia hay detrás de la más maravillosa música del mundo. Que los éxitos pueden solo salir de la nada y desaparecer, o tener una gran historia detrás y quedarse para siempre. Es absurdo no haya sido quien está promoviendo esta nueva versión de “Time”, no haya contado su maravilloso origen. Pero qué bueno que Brian May sigue siendo generoso y siempre tan comunicativo. Sobre todo respecto a un sencillo que tantos de nosotros conocimos precisamente cuando Queen estaba separado. Ahora, a recobrar todo el musical. En una de esas lo reponen en Londres.
Twitter: @SusanaMoscatel