México de Colores, espectáculo de orgullo LGBTTI
"Le gritaban joto, maricón, bruja, julia" se oyó la voz que retumbó en el auditorio Gota de Plata, ante más de 2 mil 800 personas que acudieron la tarde de este viernes a ser parte de México de Colores, que unió drama, arte, humor y reflexión.
El amor entre dos hombres sacude a los guerreros mayas, que en un acto de entrega del amor, sacrifican a las dos almas que une la muerte con una bandera arcoiris, y con una danza previa, en la que la estética y la belleza de cada ángulo del cuerpo de los ocho integrantes de esta representación, logró cautivar a los asistentes a este espectáculo.
Los aplausos no se hicieron esperar, las miradas de cada espectador se perdían en cada movimiento, en cada detalle que los bailarines profesionales utilizaron para ofrecer su presentación salpicada de música mexicana, como jarabe tapatío o sones veracruzanos, entre ellos el reconocido "Cascabel".
Pestañas largas, muy largas, delineado en colores blanco, café, negro y labios rojos con brillantina, hacían de los rostros de estos jóvenes, pertenecientes al grupo LGBTTI, únicos, como de un espectáculo de cabaret que en una mezcla de movimiento y carisma, derramaron la belleza del folklore mexicano en sus bailes tradicionales, en donde el zapateado sobre la tarima se hacían uno solo para demostrar la calidad de este grupo de bailarines mexicanos que han llevado este espectáculo al extranjero, a países como Francia y Estados Unidos.
La activista por los derechos humanos, Tania Meza Escorza, en una sonrisa sincera y en tono seguro, aseguró que Pachuca está listo para estos espectáculos, "ante la libertad y respeto que hay por los derechos humanos y sexuales", expresó, nos sin antes indicar que "esperaba un mayor aforo", aunque el que asistió fue suficiente para abrazar con aplausos, chiflidos y carcajadas cada uno de las presentaciones de este grupo artístico.
Entre el público, mujeres, hombres, niños, niñas, adolescentes, personas de la tercera edad, todos ellos entregándose a este show en donde el talento y la condición física fueron esenciales para la hora y media que duró este espectáculo.
Entre una danza en la que agradecían a un estandarte de la Virgen de Guadalupe, amarraron la metáfora contra la opresión religiosa que ha recibido el sector, siempre impecables y armónicos, para después desprenderse de los prejuicios que existen socialmente contra el grupo y sus formas de expresar y amar.
"El objetivo es presentar un espectáculo artístico que ha tenido presencia en México, en el que se recrea lo mexicano, la técnica de la danza, del cabaret y la desmitificación de la danza, así como para celebrar la diversidad, así como la diversidad sexual que se celebra en México y en el mundo", expresó Nidia Ramos Castañeda, directora general de Diversidad Cultural de la Secretaría de Cultura.
Un grupo de cuatro bailarines con coloridos vestidos en color negro con largas mangas que simulaban las alas de mariposas Monarcas, llenó de movimiento y belleza el escenario, para después llenar de aplausos en ritmo con un son iluminado por velas, entre largos faldones de tela translúcida en color rojo y negro.
Y así, la noche continuó, entre ritmos, luces, movimientos sensuales, pasión por el baile, por los aplausos, por la expresión corporal a través de la música, pero sobre todo, por la oportunidad que tienen de realizar lo que les gusta, de llenar de sonrisas y colores sus vidas a través de un México de Colores, en donde se abren más espacios para el grupo LGBTTI en Pachuca