El PP-A reclama a Díaz «diálogo» y que deje de «destruir cualquier iniciativa»
El vicesecretario general del Partido Popular de Andalucía, Toni Martín, reclamó ayer, en rueda de prensa, a la secretaria general del PSOE-A, Susana Díaz, que acepte el ofrecimiento de diálogo del presidente de la Junta, Juanma Moreno, y «no vuelva a perder una gran oportunidad de demostrar responsabilidad y hacer una oposición útil a los andaluces».
Martín señaló que el presidente andaluz «ha mostrado, desde el primer día, su disposición a mantener un diálogo fluido y a llegar acuerdos con Susana Díaz como actual jefa de la oposición», y que, pese a ello, «el PSOE sigue empeñado en no asumir el cambio y su actitud es la de destruir cualquier iniciativa del Gobierno del cambio en vez de intentar construirla juntos». Continuó su intervención ante los medios haciendo especial hincapié en que «diálogo es una palabra que no sabe aceptar Susana Díaz» y que, a pesar de ello, desde su formación mantienen que «las puertas del nuevo Gobierno siguen abiertas al diálogo porque es fundamental que haya este diálogo fluido con los partidos de la oposición, especialmente en un contexto de radicalización progresiva que se está viviendo en la izquierda».
El «Gobierno del cambio»
El dirigente popular defendió así el diálogo como «marca» del Gobierno andaluz y puso como ejemplo de ello las reuniones que mantendrá Moreno con los alcaldes de Córdoba, Granada y Jaén, «para empezar a dialogar sobre las relaciones y la colaboración entre administraciones para una mejor gestión de los intereses de los ciudadanos de Andalucía».
Al hilo de esta argumentación, quiso hacer una especial mención a lo vivido el pasado sábado en Madrid durante la celebración de la marcha del Orgullo argumentando que «el cambio es diálogo y que todos los ciudadanos cuenten por igual», al tiempo que cuestionó «qué clase de igualdad es la que segrega a los ciudadanos entre buenos y malos dependiendo de cómo piensan o a qué partidos votan», algo que «en Andalucía lo hemos sufrido durante décadas» con un PSOE al frente del Gobierno «que decidía quiénes eran los andaluces buenos y quiénes los malos», sentenció el popular. «Eso se ha acabado con la llegada del Gobierno del cambio», ya que todos los andaluces tienen que ser «también iguales a la hora de reivindicar lo que consideren oportuno en las calles, piensen lo que piensen y voten lo que voten» porque «todo el mundo podría poder respaldar las grandes causas en libertad». Continuando con el «diálogo» y más concretamente con el sector olivarero, quiso remarcar que se trata de una situación «muy difícil» y matizó que debe ser el Gobierno central el que «se siente a la mesa y dé la cara» ya que, según Martín, «nosotros estamos haciendo lo posible, pero creemos que es el turno del Gobierno de Madrid».
Por último, quiso sacar a la luz también buenas noticias para Andalucía, como por ejemplo que la comunidad «lidera» la creación de empleo en España, que junto a Navarra se encuentra «a la cabeza en crecimiento económico» y que está considerada la «segunda comunidad con más exportaciones» de España.
El crecimiento andaluz
Respecto a estas buenas nuevas, Martín resaltó que «no se habían oído nunca en Andalucía» y mantuvo que su labor fundamental es «recuperar esa ambición que nos hicieron perder tantos años de socialismo».
En relación a esta mejora en la comunidad destacó la «sensación de seguridad» que se vive ahora en Andalucía y aseguró que «todo ha cambiado» y que el nuevo Gobierno del cambio «ha supuesto un soplo de aire fresco, de ilusión y también de seguridad».
Un modelo de financiación que traiga «los 4.000 millones que nos faltan»
Martín reiteró que «el diálogo no puede ser tibieza» y, por ello, «el Partido Popular de Andalucía va a exigir, al igual que el Gobierno de la Junta, con firmeza y determinación un nuevo modelo de financiación que haga venir a Andalucía esos 4.000 millones de euros que nos faltan». «Acordamos en el Parlamento que esa es la cifra que le falta a la financiación andaluza cuando el presidente del Gobierno de España era Mariano Rajoy, y el PP-A firmó ese acuerdo. En el momento en que cambió el Gobierno, toda aquella petición y urgencia del grupo socialista en transmitir esta petición, se le olvidó y a Sánchez nunca se lo volvieron a pedir», afeó el vicesecretario, y concluyó afirmando que «se quedó metido en un cajón de la Moncloa».