¿Jaque mate a una ilusión?
Oleydis Ferrales Acosta (Francisco Vega 199-A, Las Tunas) anda atribulada por su hijo de 16 años, que estudiaba en la Escuela de Iniciación Deportiva (EIDE) de esa provincia, en la especialidad de Ajedrez; y no va a poder continuar en la misma. Todo se inició hace cinco meses, cuando comenzó a rumorearse que causarían baja cinco deportes, entre ellos el Ajedrez.
Lo cierto es que ya era una estrategia de la provincia, afirma, y no se reunieron con los padres. Se decía que si la situación económica, que si el Inder mandó a reducir 50 estudiantes de la plantilla, que si se quitarían deportes que a la provincia no le convenía tener en la EIDE…
Pasó el tiempo y Oleydis fue el 6 de mayo a la Dirección Provincial de Deportes. La atendieron el subdirector deportivo, quien se ocupa del Alto Rendimiento y otra funcionaria más. La madre pidió aclaraciones, pues no se había hecho la reunión de marras.
Y explicaron las razones de la decisión, que ella no entiende muy bien: el Inder les indica que deben limitar las plantillas de la EIDE con un porciento de bajas. Este año debían reducir 50 estudiantes, y la Dirección Provincial de Deportes daría baja a las cinco disciplinas que no aportan muchas medallas en Juegos Escolares y Juveniles. Así, Las Tunas logra mejor lugar, pues en la emulación se valoran solo los deportes inscritos en las EIDE.
Oleydis reseña lo dicho allí: si a los padres les dicen que sus hijos causan baja por bajo rendimiento, lo entenderán, porque esa es una escuela para formar atletas.
«Pero que quiten al bueno y al malo, precisa, habiendo medallistas nacionales, porque el deporte en lo colectivo no tiene un buen lugar nacional, no lo entiendo. Es campeonismo. ¿No es más lógico que se busquen mecanismos y estrategias, y en vez de quitar al estudiante que ama su deporte, lo ayuden a explotar ese talento?
«En Ajedrez hay un equipo que poco a poco ha ganado en preparación y confianza, con estabilidad del profesor y más torneos, que los prepararon para lograr, de un lugar 14 nacionalmente en 2017, un 8vo. en 2018. Mi hijo fue medallista de bronce en 2017, en el Escolar Nacional, y ya en estos momentos es juvenil. Pero cuentan con un escolar que en 2018 fue medallista de plata y en 2019 de bronce. Y el resto, aun sin medallas, ha influido con sus puntos en el resultado de torneos y juegos nacionales».
Según Oleydis, los directivos dijeron que para ellos es difícil tomar esas medidas, pero había que cumplir con un mandato nacional. Se decidió dar la reunión con los padres, la cual se hizo días después. Atendieron las inquietudes, pero ella sigue pensando que la decisión es injusta:
«La suma de los cinco deportes que salen de la EIDE da 67 estudiantes, y solo deben sacar por indicación nacional a 50. Se nos dijo que el Ajedrez causaría baja de la escuela, pero se quedarían como traslado temporal en la misma, con posibilidades de volver a ser matrícula