El MiniGlorias no puede con la SD Leioa
Los de Iñaki Alonso salen derrotados de su visita a Sarriena en el primer derbi de la temporada.
El Alavés B ha caído derrotado por 2-0 ante la Sociedad Deportiva Leioa en un partido en el que los locales fueron superiores a los albiazules. Los goles de Monje y Yurrebaso dan al conjunto vizcaíno los primeros puntos de la temporada.
El partido comenzó sin un dominador claro, con mucha pelea en medio campo y con numerosas imprecisiones por ambos equipos que no conseguían hilar ninguna jugada de peligro. El conjunto local, con el paso de los minutos, fue ganando terreno a un Alavés B que veía cómo su rival empezaba a acercase a las inmediaciones del área. El primer aviso llegó a cargo de Pradera, pero su tiro tocó en un defensa albiazul y el balón acabó saliendo por encima de la portería defendida por Gonzi.
La primera ocasión despertó a una Sociedad Deportiva Leioa que, poco después, tuvo otra clara oportinudad a cargo de Iru a la que Gonzi respondió con una buena intervención. El Alavés B lo intentaba sin demasiada suerte con balones largos buscando la espalda de una defensa local que se mostró muy segura durante la primera mitad. Fue otra vez el conjunto vizcaíno el que gozó de otra ocasión de peligro antes de que en el minuto 32, tras un fallo de la zaga alavesista, Monje abriera el marcador para un Leioa volcado al ataque.
Tras el descanso, otro error defensivo del conjunto albiazul a punto estuvo de costarle otro gol, pero en esta ocasión Pradera no acertó ante Gonzi cuando tenía todo a su favor. Lupu, que había entrado en el descanso en el conjunto de Vitoria, tuvo la mejor ocasión para el Alavés en un disparo que se marchó alto. Cuando parecía que el MiniGlorias empezaba a acercase al área rival, un penalti a favor de la Sociedad Deportiva Leioa transformado por Yurrebaso puso el 2-0 en el marcador.
El gol sentó como un jarro de agua fría a un conjunto babazorro que, pese a intentarlo, no conseguía crear peligro a un Leioa muy cómodo sobre el terreno de juego. Sólo en el minuto 71, tras el bote de una falta, Erik enganchó un cabezazo que se marchó por encima de la portería defendida por Urtzi Iturrioz. El partido todavía contó con una última clara ocasión de gol en la recta final en las botas del local Monje cuyo disparo cruzado acabó topándose con la madera.