Un final al galope

Concluyó la Feria de las Novilladas con un festejo de rejones, una función brillante y triunfal que terminó con los dos protagonistas, Ana Rita y Andrés Romero a hombros y con el público, que un día mas llenó el coso algemesinense, entusiasmado.

Se lidió un encierro de Los Espartales, con un segundo toro con el hierro de José Luis Iniesta, de muy correcta presencia y que luego en conjunto que ha propiciado en buena parte el éxito de los rejoneadores.

Ana Rita, triunfadora en esta plaza siempre que ha actuado en ella, volvió a repetir y ya tras acabar con su primer toro tenía ganada la puerta grande tras una actuación menos espectacular que otras veces pero mucho más ortodoxa y clásica, citando de frente, dando el pecho y clavando siempre arriba y muy reunido.

También con su segundo mantuvo un nivel notable, siendo muy aplaudida al clavar al violín, perdiendo una mayor cosecha de trofeos al fallar con el rejón de muerte y, sobre todo, con el estoque de cruceta ya pie a tierra.

Andrés Romero paró y llevó a su primero con mucho temple y suavidad, citando de frente y batiendo al pitón contrario, pero sin acierto al matar. Algo que sí logró con el toro que cerró plaza y feria, entusiasmando antes con las espectaculares levadas de sus monturas y sus cites con el caballo sujetándose sobre sus patas traseras. Mató con contundencia y eficacia y se le concedió hasta el rabo de su oponente.

Ficha del festejo

Novena y última de feria. Lleno

Tres toros de Los Espartales y uno, segundo, con el hierro de José Luis Iniesta, bien presentados y de buen juego.

Ana Rita, dos orejas y silencio.

Andrès Romero, ovación y dos orejas y rabo