Veinticinco años de cárcel para «El Chamaco» por matar a su mujer cuando le pidió el divorcio

La sección segunda de la Audiencia Provincial de Lugo ha condenado a 25 años y medio de cárcel a José Manuel Carballo Neira, conocido como «El Chamaco», por el asesinato en Becerreá (Lugo) en el año 2016 de su mujer cuando, delante de sus hijos, le pidió el divorcio. En virtud del veredicto del jurado popular emitido al término del juicio celebrado a mediados de este mes de octubre en la Audiencia Provincial de Lugo, los magistrados también sentencian al condenado a la prohibición de comunicarse y aproximarse durante un período de 37 años a los dos hijos de la víctima, que recibirán cada uno 101.000 euros en concepto de responsabilidad civil y perjuicios psicológicos. Además, «El Chamaco», al que se le imponen otros cinco años de libertad vigilada, también deberá abonar una indemnización de 41.000 euros a la madre de la víctima y otros 16.000 euros a la hermana. El jurado popular declaró culpable a Carballo Neira -que sustentó su defensa en que la muerte de su mujer había sido un accidente - de los delitos de asesinato con el agravante de parentesco y desprecio de género; amenazas y malos tratos. Mientras que el veredicto para los dos primeros delitos se adoptó por unanimdad, el tercero -malos tratos a su hijo pequeño- fue determinado por una mayoría de siete votos a favor y dos en contra. Así, el jurado consideró probado que «El Chamaco» disparó por la espalda a su mujer cuando ésta le pedía el divorcio delante de su suegra y sus dos hijos, resultando uno de ellos herido. El disparo se produjo «de forma sorpresiva y sin posibilidad (de defensa) por parte de la víctima, pues aprovechó que se encontraba totalmente de espaldas», recoge la sentencia, en la que se hace mención a la actitud «controladora y posesiva» que el condenado ejercía sobre la víctima, a quien trataba «con dominación y desprecio». Los hechos juzgados se remontan al 11 de febrero de 2016, cuando la mujer del acusado acudió al domicilio que la pareja compartía en Becerreá con la intención de pedirle el divorcio a «El Chamaco», que disparó por la espalda con una escopeta a su esposa. Previamente se habían registrado episodios de amenazas, como el acontecido el 20 de enero cuando intimidó a su mujer con la misma escopeta con la que perpetró el crimen.