Mientras ellos crecen, acá…
La Major League Soccer de Estados Unidos se expande de forma planificada y organizada. La primera división del futbol mexicano en cambio retrocede. De forma oficial, se anunció que la Liga BBVA estará conformada el próximo torneo ya no por 19 clubes, sino solo por 18, ante la cantada desafiliación de los Tiburones Rojos del Veracruz.
No hubo manera de prever la insolvencia financiera de Fidel Kuri, ex propietario de este equipo. Y tampoco hubo manera de encontrar en el amplio mundo empresarial del país a un grupo dispuesto a invertir en la liga... mucho menos hay condiciones para concretar lo que se había soñado: que la competición creciera a 20 equipos.
En cambio, la MLS anunció hace unas horas al Charlotte, de Carolina del Norte, su equipo número 30. El proyecto de esta organización es llegar a 32 clubes en 2025.
Este mismo año, la MLS presentó las franquicias de San Luis, de Sacramento, y un año antes presentó al Austin FC, al Nashville SC y al Inter Miami FC.
No está nada mal recordar que la MLS nació con 10 equipos a mediados de los años 90 en el siglo pasado. Hoy cuenta con un Comité de Expansión que a quienes se interesen en formar parte de ella les pide proyectos de licitación, compromisos corporativos, estrategias y desarrollo de jugadores.
Pareciera que el futbol profesional mexicano hoy está a mucha distancia de esa liga, en términos, por supuesto, de organización, mercadotecnia e ingresos, porque en el exclusivo campo de los resultados deportivos cuando integrantes de una liga y otra se enfrentan, los mexicanos lucen muy superiores. Todavía es así, pero pareciera que falta poco para empezar a vivir lo contrario.
Como sea, mientras los estadunidenses crecen y crecen, el futbol mexicano sigue enredándose entre una liga de Primera, una división de Ascenso y una serie de vacilantes criterios que solo generan incertidumbre.