Hallan un coche con un cadáver en una zona inundada por la crecida del Ebro
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del Ebro.
La voz de alarma la dieron operarios de carreteras del Gobierno aragonés, tras encontrar indicios evidentes en las márgenes del puente que apuntaban a que un vehículo había caído. Avisaron en torno a las 7.00 horas de este miércoles, según informaron fuentes de la Diputación de Zaragoza, cuyos bomberos se desplazaron hasta el lugar del siniestro y localizaron el coche hundido y un cadáver en su interior.
Las mismas fuentes han indicado que el coche acabó en el Ebro al salirse de la carretera cuando circulaba en sentido Remolinos. Todo apunta a que el conductor perdió el control del vehículo y fue a parar a esa zona inundada por el Ebro.
Los bomberos acudieron hasta el vehículo en una barca neumática y hallaron un cadáver dentro del vehículo.
Al estar fallecido, la Guardia Civil es la que se ha hecho cargo de las labores de recuperación del cuerpo y del vehículo, de acuerdo con los protocolos de investigación y judiciales que rigen para estos casos. Hasta el lugar se han desplazado efectivos de los Grupos de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil.
Se desconoce con exactitud a qué hora se produjo el siniestro, aunque se tiene la certeza de que fue durante la noche.
En el último año y medio han sido varios los accidentes mortales ocurridos en carreteras aragonesas por la caída de vehículos desde puentes y a ríos.
Así, el pasado 1 de diciembre, un joven de 25 años falleció este domingo al caer su coche a un canal en Binéfar
(Huesca). En el vehículo que conducía la víctima viajaban otros cuatro personas, que lograron ponerse a salvo. El conductor, sin embargo, quedó atrapado y falleció en las aguas del canal de Zaidín.
en marzo de este año, un joven de 28 años moría tras caer con su coche al
Canal Imperial
, a la altura de Gallur. Logró salir del vehículo y poner a salvo a una muchacha de 18 años que viajaba con él, pero tras socorrerla se quedó sin fuerzas y lo arrastró el agua.
En abril de 2018, una mujer de 39 años murió al chocar con un autobús y caer con su coche al Ebro desde un puente de Chiprana
(Zaragoza). El coche rompió la valla de protección y se precipitó al Ebro, que discurría esos días muy caudaloso como consecuencia de las riadas que se habían producido en aquellas fechas.