El Plan de Trabajo Digno convierte 273.000 contratos temporales en indefinidos desde agosto de 2018
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En concreto, el Ministerio de Trabajo ha precisado en un comunicado que solo los planes de choque de 2019, que se encuentran en la primera fase -en la que la regularización es voluntaria tras el envío de cartas-, han transformado en indefinidos 59.359 contratos temporales, el 66,5 % de los afectados, y se ha incrementado la jornada de 22.355 contratos a tiempo parcial, el 15% de los afectados.
El Plan Director, aprobado en julio de 2018 por el Consejo de Ministros, está constituido por 55 medidas operativas y 20 medidas organizativas, así como por dos planes de choque desarrollados en los segundos semestres de 2018 y 2019 contra la contratación temporal fraudulenta y los abusos en los contratos a tiempo parcial.
Valerio ha explicado «si los planes de choque de 2018 tuvieron buenos resultados, los datos provisionales de la primera fase de los planes de 2019, la que permite la regularización voluntaria tras la recepción de las cartas remitidas por la Inspección a las empresas presuntamente incumplidoras, son todavía más positivos». En esta línea, ha agradecido a la Inspección de Trabajo y Seguridad Social su labor, ya que, según ha afirmado, «los resultados están siendo tan positivos gracias al personal inspector y al personal de apoyo».
Unos recursos humanos que ha cifrado en 2.027 funcionarios, la cifra más alta de la historia, y que se va a incrementar próximamente. En concreto, la titular de Trabajo ha apuntado que «con las Ofertas de Empleo Público de 2019 y 2020 sumaremos, como mínimo, 374 nuevas plazas de personal inspector».
Valerio ha hecho incapie en que el objetivo del Gobierno es incrementar la plantilla de inspectores y subinspectores en un 23% en términos netos durante el periodo de ejecución del Plan. Además de la mejora de las condiciones laborales y de los medios materiales del personal de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, para lo que ha abierto un proceso de diálogo con los sindicatos. Lo que se cumplirá efectivamente cuando se haya formado un nuevo Gobierno.
«Queremos tener un personal inspector altamente cualificado y en un constante proceso de formación continua. Y para ello, el papel de la Escuela de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social sigue siendo decisivo», ha concluido.