Patxi Andión, de la canción protesta a hacer historia en el cine del destape

Mientras España vivía, allá por 1975, un terremoto político, social y cultural, el cine decidió convertirse en la mejor vía de escape para las pasiones más íntimas del público. El destape supuso el declive de aquellos viajes a Perpignan –con los que algunos iban a pegarse el calentón– y, al mismo tiempo, el nacimiento de nuevas estrellas del cine tan fugaces como los argumentos de aquellas películas «S» donde no hacía falta justificar los desnudos.


De ahí salieron actrices como Blanca Estrada, Adriana Vega, Eva León, Tadia Urruzola o la propia María José Cantudo. Sin embargo, en el lado masculino los desnudos no eran habituales. Así que el primero que se dejó filmar sin dejar nada a la imaginación pasó a la historia. Y ese fue el popular músico Patxi Andión, que está constatado como el primer hombre que mostró algo más de lo habitual en una película, en concreto, mostró el trasero en «El libro de buen amor» (1975).


La trágica noticia del fallecimiento este miércoles de Patxi Andión ha hecho recordar a una generación el paso por el cine de un artista que cantó directo a las conciencias. Desde aquella primera experiencia en «El libro de buen amor» trabajó en un puñado de títulos hasta la década de los noventa, entre los que destacan sus primeras interpretaciones en películas del destape, como «La otra alcoba» (de Eloy de la Iglesia, 1976), «Caperucita y Roja» (1977) o «Acto de posesión» (con Amparo Muñoz, 1977).


Además del cine «S», se dejó ver en otro de los géneros de la época, como era el cine quinqui. Su papel en «Libertad provisional», de Roberto Bodegas con Concha Velasco y José Sacristán, lo firmó en 1976. Una obra que ganó el premio a mejor película hispanoamericana en el Festival de San Sebastián. Dentro del género quinqui, Andión escribió la música de «La estanquera de Vallecas».


Ya en los ochenta trabajó en la adaptación de Manuel Vázquez Montalbán que firmó Vicente Aranda titulada «Asesinato en el Comité Central» (1981), donde se investigaba el asesinato del secretario general del Partido Comunista de España. Patxi Andión era el protagonista absoluto de la cinta, en la que interpretaba al invesigador Pepe Carvalho.


Después de ese título, su carrera se ralentizó. Firmó otro trabajo más en 1982 bajo la dirección de Roberto Bodegas, en esta ocasión «Corazón de papel». Una cinta en la que compartía protagonismo con gente como Antonio Ferrandis, Ana Obregón o Héctor Alterio. Desde entonces, poco más. Una aparición en Brigada Central (la serie de TV de 1989) y ya en 1996 la olvidada «La sal de la vida».


Pese a sus incursiones en el cine, la carrera de Patxi Andión será siempre recordada por las canciones que una generación cantó. Y aún así, en los libros de esa historia menor del cine que fue la época del destape, siempre se recordará que el primer desnudo masculino fue protagonizado por un icono de la canción protesta, con todas las implicaciones.