El coronavirus dispara el interés por suscribirse a un coche

El coronavirus puede causar una revolución en muchos ámbitos de nuestra vida cotidiana. Uno de ellos puede ser la forma en la que elegimos y adquirimos un vehículo. El canal digital y, sobre todo, la necesidad de tener flexibilidad, ante unas circunstancias económicas y personales difíciles de preveer a corto y medio plazo, pueden suponer un incentivo para optar por algunas de las nuevas fórmulas de negocio que en los últimos años están surgiendo en torno al automóvil. En los últimos años comenzaba a asentarse la fórmula del renting, que permite acceder a un vehículo mediante pagos mensuales, que incluyen también su mantenimiento. La startup española Bipi propone ir un paso más allá, con un modelo de suscripción, todavía más flexible: mientras el renting exige un compromisió de años, en la suscripción éste se reduce a meses o incluso semanas. Incluye además la opción de cambiar a un modelo más asequible si las circunstancias personales del cliente cambian. Un alto grado de agilidad que, según explica Hans Christ, uno de sus fundadores, está generando mucho interés durante el estado de alarma. «Estamos teniendo muchísima demanda», asegura Christ a ABC mediante una videoconferencia. El emprendedor cree que detrás de este auge se esconden varias razones. «La principal -cuenta- es que todos estamos buscando opciones para evitar el transporte publico al maximo cuando podamos salir de casa. Ahora mismo no hay alternativas que te den la flexibilidad y que sean accesibles en estos tiempos». Según explica, el tráfico de su herramienta digital ha subido casi un 200% en los últimos diez días, respecto a las anteriores cuatro semanas. «Estamos viendo un incremento muy alto porque ya estamos viendo la luz al final del tunel. La gente tendra que seguir llendo al trabajo, a los niños… y busca alternativas», detalla. Fundada hace tres años, y con más de 75.000 clientes repartidos por toda la geografía española, el tener que trabajar exclusivamente por canales digitales no ha pillado por sorpresa a la compañía. «Seguimos trabajando todos desde casa de igual forma», cuenta Christ. «Al ser una empresa tecnológica ha sido muy fácil la transición a casa. Todos tenemos portátiles y nos estamos adaptando muy bien. Y ya teníamos una cultura liberal de trabajo desde casa». En su web, Bipi ofrece desde escúteres por 149 euros al mes pasando por modelos de Tesla Model S, cuya mensualidad alcanza los 999 euros. Entre medias, un Fiat 500 GLP con etiqueta Eco se puede alquilar por tres, seis, doce, dieciocho o veinticuatro meses desde 249 euros, un Nissan Micra por 299 o un Volkswagen Golf por 369. Todos los pasos de la operación se pueden realizar de manera digital, incluyendo la transacción. Al finalizar, el coche se envía al lugar de residencia del usuario. «La suscripción que ofrecemos es de hasta 36 meses. Si las cosas van bien, puedo ampliar el plazo, cambiar de coche o, si no, devolverlo. Ahora mismo la demanda que estamos teniendo es para permanencias cortas y medianas, de seis a doce meses», cuenta Christ. «El cliente piensa: en mayo salgo de casa, pero no sé si luego me puedo quedar en paro. Así, a final de año decido si me quedo con el coche o no».