Comunidades sin test para el macroestudio que debe empezar el lunes en los centros de salud
A partir de este lunes, las comunidades deberán empezar a tomar muestras de sangre de 60.000 españoles que están llamados a participar en un macroestudio con el que el Gobierno pretende obtener una foto de la epidemia en España. En colaboración con el Instituto Nacional de Estadística se han seleccionado al azar a 36.000 hogares para que la muestra tenga participantes de todos los grupos de edad y localizaciones geográficas.
Los elegidos deberán acudir a su centro de salud para que les tomen una muestra de sangre. El análisis determinará la presencia de anticuerpos del coronavirus para saber si han estado en contacto con la infección. Así se conocerá el grado de expansión del virus en la sociedad española. Pero ayer no todas las comunidades autónomas habían recibido el test para su realización. Tampoco Semergen, la sociedad científica de Atención Primaria, conocía oficialmente el proyecto del Ministerio de Sanidad que pilota precisamente en sus profesionales sanitarios. «No tenemos ninguna información oficial. No nos han consultado el proyecto», explicó ayer el presidente de Semergen, José Luis Llisterri.
Semergen cree que la red de atención primaria con más de 3.000 centros de salud, 10.000 consultarios y 35.000 médicos y sanitarios puede afrontar el estudio. Aunque a su presidente le preocupa que comience este proyecto sin antes haber sometido al test a los profesionales sanitarios que realizarán las pruebas. "Han estado en primera línea, conteniendo la epidemia para evitar el colapso de la red hospitalaria y con menos protección que en los hospitales. Hagamos primero el test a los profesionales y, a continuación al resto de la población", pide Llisterri, quien teme exponer aún más a los profesionales de primaria o convertirlos en transmisores de la enfermedad".
Este macroestudio fue anunciado el pasado 7 de abril por el ministro de Sanidad prometiendo resultados en semanas, pero aún no ha conseguido arrancar. Hasta se especuló con que las pruebas las harían militares. Salvador Illa aseguró entonces que el proyecto empezaría «la semana que viene, lo antes posible» y que se realizaría en dos oleadas a lo largo de tres semanas. Ningún plazo se ha cumplido.
Muestra representativa
El muestreo realizado proporciona una muestra representativa a nivel provincial, autonómico y nacional. El tamaño muestral por provincia varía entre 900 personas en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla y 6.000 personas en Madrid, lo que permite estimar la seroprevalencia de COVID-19 con suficiente precisión en todas las provincias. Se preserva a su vez la proporcionalidad poblacional interprovincial, lo que redundará en una mayor eficiencia en las estimaciones tanto autonómicas como nacionales, ha explicado el Ministerio de Sanidad en una nota de prensa.
Los participantes en este macroestudio responderán a un breve cuestionario, además de realizarse las pruebas serológicas (de sangre)s para determinar si tienen anticuerpos frente al virus.
En primer lugar, se les hará un test rápido de determinación de anticuerpos en sangre, que proporciona información para saber si la persona ha estado infectada. Esta prueba se realizará en el propio hogar o en un centro de salud, en función de la evolución de la epidemia y de las circunstancias de cada familia.
Un pinchazo en un dedo
La sensibilidad de esta prueba, que sólo requiere de un pinchazo en el dedo, se estima que es superior al 80%, pero esta información relativa a su precisión diagnóstica se ha obtenido en grupos muy concretos de pacientes y se desconoce si puede extrapolarse al conjunto de la población.
Para asegurar la fiabilidad de los resultados y aplicar el máximo rigor metodológico, se tomará una muestra adicional pinchando en la vena del brazo, como una análisis convencional, en todos aquellos participantes que den su consentimiento. El análisis de las muestras de suero, liderado por el Centro Nacional de Microbiología, se hará usando técnicas serológicas más sofisticadas y más precisas.
Gracias a estas dos pruebas, que combinan diferentes niveles de precisión, se obtendrá una estimación poblacional de la presencia de anticuerpos del virus.
Junto a estos dos estudios serológicos, los participantes en el estudio responderán diferentes preguntas sobre síntomas y posibles fuentes de infección, mediante un cuestionario epidemiológico que se recogerá a través de una aplicación web para facilitar una obtención rápida de la información.
Los hogares han sido seleccionados al azar. Cada uno de ellos recibirá una llamada telefónica para informar a sus residentes sobre los objetivos del estudio, solicitar su consentimiento y concertar la visita domiciliaria, o la cita en el centro de salud. La participación en el estudio es voluntaria.