Un secuestro frustrado: cazado tras raptar al sobrino de su expareja para que volviera con él

Ante un inminente un juicio por malos tratos a su expareja, no se le ocurrió mejor manera que secuestrar su sobrino con el fin de presionarla para que volviera con él. Sucedió el pasado jueves en Hospitalet de Llobregat (Barcelona). Ese día, la mujer alertó a los Mossos d'Esquadra, a través del teléfono 112 de emergencias, de que su exnovio se había llevado por la fuerza al joven, de 23 años. La Policía autonómica inmediatamente desplegó un dispositivo que horas después sirvió para liberar a la víctima: permanecía secuestrado en un piso de una urbanización de Rubí (Barcelona). El joven estaba sano y salvo. Los agentes de la unida de secuestros y extorsiones de los Mossos, que asumieron las pesquisas, tenían claro que lo que movía al secuestrador, de 37 años y nacionalidad ecuatoriana, eran sus celos ante la posibilidad de que su expareja pudiese rehacer su vida sentimental con otra persona. Una cuestión importante acentuó la alarma en los especialistas de esta unidad de la Policía autonómica: el individuo tenía un perfil violento y numerosos antecedentes policiales. Por eso los agentes decidieron también poner en marcha un dispositivo de protección y acompañamiento a la expareja denunciante. Las indagaciones situaban al autor del secuestro en una casa de una urbanización de Rubí. Horas más tarde, y a contrarreloj, los Mossos montaron un dispositivo policial con el que pudieron liberar al joven sano y salvo. Allí detuvieron al secuestrador y a un cómplice, de 36 años, también ecuatoriano, y también con un amplio historial delictivo. Tenían conexiones con algunas bandas juveniles violentas y diversos requerimientos de detenciones por diversos juzgados. El Juzgado de Instrucción número 1 de Hospitalet, que tutela la investigación, decretó el ingreso en prisión preventiva de la expareja de la mujer y dejó en libertad con cargos al supuesto colaborador.