Estados Unidos invierte en tecnologías avanzadas, pero aún no es suficiente para alcanzar a China
Estados Unidos invierte en tecnologías avanzadas, pero aún no es suficiente para alcanzar a China
Según un análisis reciente, el gasto general del gobierno de EE. UU. en tecnologías vitales aumentó significativamente en los años fiscales 2020 y 2021, pasando de $ 60,7 mil millones en el año fiscal 2017 a $ 117,2 mil millones en el año fiscal 2021. Sin embargo, según los informes, todavía está por debajo de lo que China está invirtiendo en las mismas áreas de investigación.
El gobierno de EE. UU., y el Departamento de Defensa en particular, está invirtiendo más en tecnologías de punta, pero un nuevo informe analítico señala que Washington no está gastando lo suficiente para mantenerse al día con competidores como China en campos como la inteligencia artificial y el aprendizaje automático.
Según el nuevo estudio de la firma de análisis de datos Govini, National Security Scorecard: Critical Technologies Edition, el gasto de EE. UU. en tecnologías cruciales como armas hipersónicas e inteligencia artificial sigue siendo modesto en comparación con sus rivales chinos.
La firma argumentó que, dado el diseño claro de la información, los responsables de la toma de decisiones en la administración de Biden están mejor equipados para dirigir el desarrollo de estas tecnologías cruciales y el programa militar en general.
«En los últimos años, el gobierno de EE. UU. ha reconocido la importancia de la tecnología emergente tanto para la competencia estratégica con China como para nuestra futura prosperidad nacional, y múltiples administraciones y congresos han tomado medidas en consecuencia», dice el informe, según Breaking Defense. «Pero a pesar de estos esfuerzos, moverse lo suficientemente rápido para vencer a China sigue siendo un desafío pernicioso».
Se dice que el estudio de Govini se basa en una lista de áreas tecnológicas cruciales que la oficina del subsecretario de defensa para investigación e ingeniería publicó a principios de este año. La lista cubre 14 tecnologías, incluida la tecnología espacial, la ciencia cuántica, la inteligencia artificial y el aprendizaje automático (IA/ML) y la biotecnología.
Tara Murphy Dougherty, directora ejecutiva de Govini, dijo en un comunicado de prensa que en el informe de este año, la compañía pensó que era «vital centrarse en tecnologías críticas para el futuro de la seguridad nacional».
«El Departamento de Defensa ha reconocido la importancia de la tecnología emergente en la actual competencia estratégica con China, particularmente en la competitividad tanto económica como militar», explicó.
«El Departamento depende de la innovación que se lleva a cabo tanto en el sector público como en el privado para desarrollar y desplegar las capacidades futuras que nuestras fuerzas armadas necesitan. Sin embargo, a pesar de los esfuerzos continuos, nuestra ventaja competitiva está en riesgo. Como muestran los datos, un cambio más agresivo a favor de la innovación es imperativo, más de lo mismo no funcionará.”
Según el estudio, el Departamento de Defensa sigue teniendo dificultades para interactuar con los sectores de empresas emergentes e innovación; en cambio, favorece a los principales integradores y empresas de servicios, perdiendo oportunidades para aprovechar los desarrollos emergentes. Según los informes, China, por ejemplo, tiene la oportunidad de tomar la delantera en campos como la computación cuántica, la inteligencia artificial y el aprendizaje automático debido a la financiación limitada de EE. UU.
Además, los gastos de EE. UU. en AI/ML están permitiendo una conciencia situacional nunca antes vista en el conflicto de Ucrania y darán forma a los conflictos en el futuro, afirmó la firma en el informe.
Sector de biotecnología favorecido por gobierno de EE.UU.
En cuanto a los detalles, debido a la pandemia de COVID-19, la inversión en biotecnología por parte de organizaciones gubernamentales fuera del Departamento de Defensa fue la que más aumentó, alcanzando aproximadamente $40 mil millones en el año fiscal 2021.
Según el informe, el Ejército de EE. UU. invirtió más de $20 mil millones en biotecnología en el año fiscal 21, que fue el mayor aumento entre las fuerzas armadas.
El gasto en IA/ML y autonomía a nivel federal fue de $50 mil millones, con $12 mil millones asignados para el año fiscal 21. La investigación divide AI/ML y la autonomía en subsegmentos y revela que la categoría de «datos a escala», que incluye cosas como almacenamiento de arquitectura de datos, adquisición de datos y fusión de datos, experimentó el mayor crecimiento de inversión.
Sin embargo, el informe señaló que, si bien la inteligencia artificial y el aprendizaje automático siguen influyendo en el conflicto de Ucrania, EE. UU. no está realizando las inversiones necesarias para evitar perder el campo de batalla del futuro. «El futuro de la guerra ha llegado», según el informe.
«Los drones autónomos y semiautónomos merodean sobre el campo de batalla; la fusión de inteligencia impulsada por la inteligencia artificial brinda a los comandantes una comprensión incomparable del espacio de batalla; los piratas informáticos libran batallas cibernéticas en gran parte invisibles en las sombras, y los poderosos dispositivos informáticos y de comunicaciones móviles permiten a los soldados aprovechar niveles de conciencia y letalidad», dijo.
Sin embargo, se informa que el Departamento de Defensa continúa elevando su nivel de inversión en IA. El Pentágono buscó su presupuesto más alto para investigación y desarrollo en su solicitud de presupuesto fiscal 2023, con una financiación significativa destinada a la IA. El Pentágono también está trabajando en una serie de proyectos de IA y acaba de establecer una nueva agencia para administrar sus datos e iniciativas de IA.
Según el informe, el gasto anual del gobierno en todas las demás áreas aumentó excepto en tecnología espacial, donde la inversión fue prácticamente plana entre el año fiscal 21 y el año fiscal 2017. Pero Govini dijo en el estudio que debido al creciente énfasis del Departamento de Defensa en el dominio espacial, es probable que esto cambie en el futuro.
Sin embargo, el presidente de la empresa, Bob Work, enfatizó en el comunicado de prensa que Estados Unidos «simplemente no puede permitirse el lujo de ceder la competencia de innovación a China», ya que «hay demasiado en juego».
«En este sentido, a menudo se dice que en el Pentágono, el presupuesto representa la política. Una cosa es decidir buscar nuevas capacidades y capacidades; otra es saber cómo se gasta el dinero. Y, lamentablemente, las decisiones de política y el gasto real a menudo Por lo tanto, las opiniones basadas en la ciencia sobre el gasto real en áreas de innovación y tecnología son esenciales para que los líderes superiores y nuestras agencias de seguridad nacional conozcan la verdad y busquen los avances tecnológicos necesarios «, explicó. «Comprender las inversiones realizadas en tecnologías críticas también brinda contexto para compensaciones potencialmente dolorosas. Los líderes de defensa deben usar esta información para facilitar debates transparentes sobre cómo equilibrar las prioridades de defensa a largo plazo con las crisis nacionales actuales, como una pandemia o un desastre natural».
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