Alegría de siempre desde la cultura
Llegó el verano y con él un amplio despliegue de propuestas destinadas al entretenimiento y sano disfrute de la población, más allá de playa, piscina y sol. Se trata de apelar al arte y al conocimiento compartido entre todos, para lo cual el sistema institucional de la cultura desempeña un papel esencial.
Las primeras actividades que han tenido lugar, como la Fiesta Ciudad del Mar en Cienfuegos o el Festival Habana Ciudad Electrónica, auguran que pese a las carencias y los retos que afronta el país este será un verano de sorpresas, o al menos es el espíritu con el que se trabaja desde el entramado cultural de la nación y otros sectores.
«Este verano tiene que ser un espacio para el abrazo. Nuestra meta es llegar a todos los públicos y que participen junto a nosotros». Así lo asegura Lizette Martínez Luzardo, directora de Políticas Culturales del Ministerio de Cultura (Mincult), quien añade: «hemos trabajado en un diseño a partir de los intereses y las necesidades de la población, y pensando en todos los grupos etarios.
«Este es un verano atípico, el primero sin mascarillas luego de dos años de pandemia.Queremos fortalecer sobre todo la programación los fines de semana para los más jóvenes y entre semana estaremos trabajando para el adulto mayor», explica la funcionaria, quien en medio de estos días de arrancada se ha acercado a Juventud Rebelde para ofrecer algunos pormenores del plan de actividades.
El trabajo de los jóvenes ha sido fundamental, puntualiza la responsable de Políticas Culturales del Mincult, pues para la concepción de este plan se tuvo en cuenta la participación directa de la población en la conformación de las opciones. La mayoría de los promotores culturales, instructores de arte y artistas que han intervenido son jóvenes.
«Nuestros promotores culturales e instructores de arte trabajan cotidianamente en las escuelas y en las comunidades, pero además contamos con más de 500 proyectos socioculturales reconocidos por el sistema institucional, que participan activamente en la vida cultural del país. Pretendemos que en este verano, los espacios donde funcionan esos proyectos y otros se conviertan en focos de socialización para compartir el arte y el conocimiento», explicó.
Gracias a esa labor se prevé la realización del 14to. Festival Internacional Timbalaye: La Ruta de La Rumba, festivales provinciales de ruedas de casino, rutas patrimoniales desde las casas de cultura, la activación nacional de la Guerrilla Cultural 50 Aniversario de la Brigada de Instructores de Arte José Martí, así como los festivales zonales de Música, Caña y Azúcar, promotores de la expresión cultural de cada territorio.
Celebraciones hacia dentro
El Movimiento de Artistas Aficionados de la Federación Estudiantil Universitaria (FEU), la Brigada de Instructores de Arte José Martí, la Asociación Hermanos Saíz, así como la Unión de Jóvenes Comunistas son parte ineludible de un plan de celebraciones que mira hacia adentro, a explotar las potencialidades de cada territorio y donde la comunidad está puesta en el centro de dicha planificación.
«Una de las experiencias que queremos desarrollar es la organización de conciertos de graduación de la enseñanza artística en las comunidades, para que los niños, jóvenes y adolescentes que forman parte de ese tipo de enseñanza puedan presentarse en su barrio, con sus vecinos, con el concurso también de la población, para compartir lo que han aprendido en este tiempo», comenta Martínez Luzardo, quien apela a la vocación de servicio de nuestros artistas y recuerda que es un principio que proviene de nuestras escuelas de arte, paradigmas dentro de cualquier diseño que se pudiera realizar para esta etapa estival.
«Para nosotros no es raro que el verano inicie con las acciones que hemos realizado, por ejemplo en la comunidad de Romerillo o en La Habana Vieja, con los pasacalles, talleres y cursos de verano que se impartirán en las 37 escuelas de arte del país y no solo dentro de esas instituciones, sino que llegarán a muchas comunidades», puntualizó.
Otros acontecimientos culturales que tradicionalmente acompañan a esta etapa podrán su atención en que las distintas manifestaciones culturales lleguen a regiones más intricadas, como la Cruzada Artística Literaria por el Escambray, o la Jornada 13 de Agosto, dedicada a recordar a los hermanos Luis y Sergio Saíz Montes de Oca, en el aniversario 65 de su vil asesinato.
El Instituto Cubano del Libro trae sus propuestas de Lecturas de Verano, con especial atención en los gustos de niños y jóvenes, así como novedosas alternativas para descarga online desde el sitio web de Cubaliteraria. Además, se realizarán exposiciones transitorias a lo largo del país, celebrarán la Jornada Arte Comic en Camagüey, y los cines se vestirán de gala con el 5to. Festival de Cine de Verano.
Regresan los festivales provinciales de ruedas de casino, proyectos socioculturales, que juntan la voluntad de promotores culturales e instructores de arte con la musicalidad y la iniciativa de la gente del barrio.Foto: Calixto N. Llanes/Archivo.
«Tenemos este año más de 106 rutas culturales agrupadas en el concepto Cuba: Historia y Cultura, que es una opción en la que integramos a la gran mayoría de nuestras instituciones. En estas la población puede acceder a la biblioteca, la galería, el museo, sitios históricos de la comunidad…, pero también disfrutar de otras opciones que no están necesariamente vinculadas a organismos de cultura», precisa la funcionaria, y asegura que en las plataformas digitales de las direcciones provinciales de Cultura y en cada institución cultural se presenta una actualización de las carteleras territoriales para consulta del público.
Martínez Luzardo confiesa que aún queda pendiente mucho trabajo para que las propuestas convenidas salgan adelante, para lo cual, asegura, cuentan con el apoyo y entusiasmo necesarios desde el inicio. «Esperamos lograrlo en la mayoría de los lugares, porque sabemos que todavía hay limitaciones; hay lugares donde todavía no tenemos ese nivel de actividad que se necesita en estos tiempos y creo que debemos reconocer ese activismo natural que surge en muchas partes del país.
«Hay muchos lugares donde los promotores culturales son personas que no perciben un salario por eso, y sencillamente tienen esa vocación de departir con la comunidad, y para nosotros esos líderes naturales son parte de nuestro sistema de instituciones de la cultura. Junto a ellos, nuestros creadores y el pueblo disfrutaremos, sin duda, de este verano con la alegría de siempre».