La gorra beisbolera como accesorio estrella del otoño e invierno

Aunque las marcas a pie de calle se empeñen en no dejarlo ir del todo, al gorro de pescador o bucket hat le ha salido competencia que amenaza seriamente con su posición dominante de complemento masculino para la cabeza que ejercía con autoridad hasta el pasado verano. No es cualquier enemigo: hablamos de la gorra beisbolera, el clásico de los 90 que empieza a inundar el timeline de los prescriptores de moda y las portadas de la de revistas de moda masculinas a nivel internacional. Por gorra beisbolera, por si no te queda claro —sería lo más normal del mundo entre tantas alternativas y con tanto tiempo que ha pasado lejos de los focos de la industria de la moda este complemento—, nos referimos a la gorra canónica que todos tenemos en la cabeza. De visera moderada, nada que ver con los diseños aplanados tipo ala de gran tamaño y ligeramente curvada, sin necesidad de doblarla de manera exagera —sí, llegó a estar de moda entre los adolescentes doble la visera de sus gorras hasta darles formas picudas, ¿te acuerdas? Puede que tengas una foto de esta guisa de tu adolescencia guardada en algún cajón…—. Nacho Yanes con gorra beisbolera - Instagram @nachoyanes También destacan por su diseño abierto en la parte posterior, donde se rematan, al menos las de estética más casual y modernas, con ajuste mediante tiras de tela —las más deportivas, con broche—, y su copa es relativamente pequeña y ajustada al tamaño de la cabeza. No queda bien intentar llevarla extragrande como ocurre con la gorra urbana que ha sido tendencia en la última época, esa que es la favorita de las estrellas del trap y hip hop contemporáneo. A todos ellos hay que ir avisándoles de que su música será tendencia, pero ya no lo son las gorras que lucen en sus videoclips, entrevistas en televisión y actuaciones musicales. Ahora la gorra que marca la pauta es la beisbolera , esa que los norteamericanos se ponían con traje en los 90, la misma que luce Kendall Roy (Jeremy Strong) en la serie más aclamada por la crítica del momento, ‘Sucession’ —regresará con nueva temporada en primavera del 2023—. Un amplio radio de acción Esta gorra está íntimamente vinculada al deporte que le da su popular nombre, el béisbol. Si bien en la actualidad se ven diseños con viseras aplanadas, evolucionado a de la mano del gusto de los muchísimos jugadores latinos que copan la liga estadounidense (MLB), la mejor del planeta, la gorra de béisbol clásica es como la que llevan ahora modelos, influencers y estrellas populares cuando pisan un evento en el que puedan vestir casual. Andrea Faccio con gorra - Instagram @andreafaccio La mayoría, curiosamente, de los diseños que lanzan las distintas firmas de ropa, tanto de lujo como deportivas o populares son de estética retro —desde Casablanca a Zara pasando por Nike—. Y, en general, están fabricadas en tejidos más apropiados a priori para la moda urbana, de a pie, que para el contexto deportivo en el que se inspiran. La pasarela ya avisó de que se empezarían a llevar de cara a la temporada pasada, pero como suele ocurrir en estos casos, ha costado un poquito más que se viralice la tendencia. Ahora, parece imparable: en otoño está cogiendo fuerza, hibernará con el frío, tiempo del gorro de lana o beanie, y en primavera verano del año que viene tiene toda la pinta de que no llevarás otra cosa. Y no solo porque te proteja del sol; sobre todo, porque será trendy hacerlo. Ya lo es, de hecho. La gran ventaja de este complemento es que puedes tener varios modelos en casa porque no es costoso. Y, además, hay modelos para todos los gustos estéticos, más que por la forma, que ya hemos dicho que es bastante fiel a los modelo originales de gorra beisbolera, por el color. La paleta es amplísima, aunque si tenemos que elegir, nos decantamos por los azules y los tonos marrones, tierra o granates. Estamos seguros de que así las usarás muchísimo más. Marc Forné con look abrigado y gorra - Instagram @marcforne No dudes en hacerte con una y empezar a explorar sus posibilidades. Cuando vayas a hacerlo, olvídate de llevarla solo con vaqueros. Disfruta de ella durante el otoño de la misma forma que te pones el gorro de lana en invierno, pero en looks con menos capas o, al menos, no tan gruesas. Con pantalones de pinzas rectos y holgados, con botas con suela track, junto a una gabardina, con una sobrecamisa, con jerséis de punto, incluso con americana si no llevas corbata. De verdad, el origen puede ser deportivo, pero la forma de llevarla es muy casual, a cierta distancia de la estética athleisure. Esto es, mejor con unos pantalones beis y una gabardina que con un dos piezas de pantalón y hoodie de algodón, por ejemplo. Es más, de juntar en chándal con la gorra beisbolera, mejor quítate la idea de la cabeza. Alberto Ortiz con vaqueros, camiseta y gorra - Instagram @albertoortizrey Y ya sabes: nada de llevarla holgada ni hacia atrás. En cuanto a la forma y la posición, la gorra beisbolera no admite demasiadas innovaciones. Tiene líneas en este sentido que no debes cruzar porque el fracaso está asegurado. En cambio, apenas la tiene, ahora que tanto se lleva, en cuanto a los estilismos en los que encaja. Por este camino, sí, déjate llevar.