La Guardia Civil investiga el asesinato de dos niñas de 2 y 4 en Almería como un caso de violencia vicaria
La Guardia Civil investiga el presunto asesinato de dos niñas de dos y cuatro años de edad así como la posterior muerte de su padre en una pedanía del municipio de Gérgal (Almería). Fuentes de la investigación han confirmado a Europa Press los hechos que tuvieron lugar en la noche de este domingo en una zona diseminada del municipio gergaleño, en el interior de una vivienda.
Si bien la investigación continúa abierta, la línea que ha cobrado más fuerza conforme a los indicios que se manejan hasta el momento es que el hombre habría matado a sus hijas de corta edad antes de acabar con su propia vida. Aunque de momento se desconocen más detalles de este suceso, se señala a un presunto caso de violencia vicaria con un envenenamiento como posible causa.
Fuentes de la Subdelegación del Gobierno, citadas por la agencia EFE, afirman que el progenitor habría usado algún tipo de sustancia venenosa. Según ha apuntado la alcaldesa del municipio almeriense, Sonia Guill, en Canal Sur, fue la madre quien encontró los cuerpos sin vida de las niñas al ir a recogerlas al cortijo en el que estaban con su padre.
Asimismo, la alcaldesa ha señalado que la Guardia Civil ya había estado en numerosas ocasiones en el domicilio.
El hombre tenía antecedentes por violencia machista, pues la mujer lo había denunciado por malos tratos, y una orden de alejamiento de su expareja en vigor.
Según ha indicado el 112 de Andalucía a EFE, sobre las 22:30 horas el centro coordinador recibió un aviso por la muerte de estas personas en un cortijo de Las Alcubillas, hasta el que fueron movilizados efectivos de la Guardia Civil y el 061, que confirmaron la muerte de las dos menores y el adulto.
Por su parte, la alcaldesa de Gérgal (Almería), Antonia Contreras, ha explicado a EFE que se trata de una familia de origen rumano que residía en un cortijo junto a la estación de tren de este municipio.
Ha precisado que la madre de las niñas se había separado del fallecido debido a los malos tratos que sufría a manos de éste, que tenía una orden de alejamiento que le impedía aproximarse a la mujer.
Ha señalado que tras separarse de él la mujer se fue a vivir a Las Alcubillas, una pedanía cuya mitad de territorio corresponde a Gérgal, y la otra mitad a Alboloduy, siendo en esta última parte en la que residía ahora la madre de las niñas, y a dónde habría ido el fallecido a presuntamente acabar con la vida de sus hijas.