A siete jornadas para el final de la
Liga, el
Barça no ha recibido ni un solo penalti en contra. El único árbitro español que le pitó uno en la actual temporada fue
Juan Martínez Munuera en la final de la
Supercopa de Arabia ante el
Real Madrid (4-1). El árbitro, hijo del fundador de la Peña Madridista ‘Los amigos’, lo pitó y significó el ‘hat-trick’ de
Vinicius contra el
Barça, que perdió su primer título en el mes enero, y sumió al Club en un estado de nervios que solo se relajó con la dimisión diferida de
Xavi y con el advenimiento ilusionante de
Pau Cubarsí. El dato es todavía más significativo al ver que el Barça es el único equipo de primera que no ha recibido ninguna pena máxima en contra, tras 31 encuentros. El balance de 5 a favor y ninguno en contra sitúa al equipo de Xavi como el más beneficiado de los 20 equipos de la Liga. Y eso que en sus visitas a Madrid (Getafe y Vallecas) el VAR impidió que el Barça pudiese ganar sendos partidos por penaltis clamorosos cometidos sobre
Araujo y
Raphinha. El colmo fue la noche del Villarreal en Montjuïc. En el minuto 90, con 3-3, penalti por manos de
Comesaña en el área.
Jaime Latre desde el VAR considera que el defensa tiene el brazo pegado al cuerpo en una acción que, después, hemos visto como se pitaba penalti en otros partidos. Del 4-3 se pasó a la locura del 3-5 y en el Club se armó la marimorena con la dimisión diferida de
Xavi, cinco minutos antes de que le echaran. ¿Y el
Real Madrid? Hasta el momento de recibir al
Barça, lleva 4 penaltis a favor por 1 en contra. No los ha necesitado para estar 8 puntos por encima a 7 jornadas del final.
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