El día que Feijóo si vio el “contexto adecuado” para la moción de censura
Alberto Núñez Feijóo no ha querido cerrar la puerta a presentar una moción de censura contra Pedro Sánchez tras las elecciones europeas con el apoyo de Junts.
Durante una entrevista este lunes en Antena 3, el líder del PP aseguró que utilizará “todas las herramientas que consideremos oportunas” para desalojar al presidente del Gobierno. Aunque puntualizó que para estudiar esta opción hay que esperar “a tener el contexto adecuado” y “pensar qué puede ser útil en ese contexto”.
Según ha escuchado El Chivato a destacados cargos de Génova, Feijóo sí vio el “contexto adecuado” para una moción de censura tras la incontestable victoria del PP en las elecciones gallegas del pasado 18 de febrero.
Contaba con que, dos meses después, los comicios en el País Vasco del 21 de abril iban a marcar el futuro del PNV, que temía dejar de ser la primera fuerza política en Euskadi y perder el Gobierno autonómico... a manos de EH Bildu.
De confirmarse el ‘sorpasso’ de Bildu al PNV, como finalmente ocurrió, sería el momento del punto de inflexión para los de Andoni Ortuzar, confiaban en el entorno del líder del PP: “Nos vendrán suplicando que les apoyemos para recuperar la Lehendakaritza”, afirmaban.
Pero el resultado conseguido finalmente por los ‘populares’ en Euskadi (7 escaños) quedó lejos de lo que el PP vasco vaticinaba a mediados de febrero, con el viento a favor de los resultados gallegos, cuando sus sondeos apuntaban por encima de los 10.
Creían que el PNV sufriría un desgaste histórico por sus acuerdos con el Gobierno de Pedro Sánchez y que podrían fagocitar ese voto de “los cabreados” con los nacionalistas vascos.
Y ahí centraron los populares su estrategia en esas semanas. Hasta el punto de que la dirección del PP, según ha escuchado El Chivato a altos dirigentes de Génova, llegó a proponer a la cúpula del PNV ‘darle’ el Gobierno vasco si le apoyaba para derribar a Pedro Sánchez con una moción de censura en Madrid.
Según los cálculos de Génova, el PP se encontraría en condiciones de presentar tras las elecciones catalanas del 12 de mayo una moción de censura contra Sánchez, que incluso hasta podría ganar. También porque el líder socialista habría tenido grandes dificultades para cumplir todas las promesas hechas al nacionalismo catalán, especialmente a Junts.
Si la censura salía adelante, Albert Núñez Feijóo podría convertirse entonces en presidente del Gobierno.
Sin embargo la dirección del PNV trasladó a los representantes populares que abandonaran toda esperanza: su partido no cambiaría de posición, tampoco a mitad de legislatura, ni aunque Pedro Sánchez incumpla sus compromisos con Euskadi.
El motivo que esgrimieron es que, en cualquier ecuación, es necesaria la participación de Vox, formación incompatible con los nacionalistas vascos.