Los representantes de los alumnos en el Consejo Escolar de la Escuela Oficial de Idiomas (EOI) Raimundo de Toledo, creada en 1988, denuncian en una carta enviada a ABC que la administración educativa regional lleva años haciendo caso omiso a la petición de que se implanten nuevos idiomas en el centro. Desde que abrió la escuela, se ha venido impartiendo las enseñanzas de inglés, francés y unos años más tarde, alemán, italiano, español lengua extranjera y ruso, este último no como enseñanza oficial sino como Proyecto Singular. A través de encuestas y evaluaciones, los alumnos han venido solicitando desde hace años la implantación de nuevos idiomas, en concreto ruso (que no se imparte de forma oficial), portugués, árabe, chino y japonés. Estas peticiones se han canalizado a través de los medios oficiales a los responsables de la Consejería de Educación de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, «sin respuesta o con respuesta denegatoria». Ya en el año 2017 se recogieron firmas entre el alumnado para la implantación de los idiomas chino, japonés, ruso y portugués. «No obstante, esta administración educativa optó por el silencio negativo a pesar de ser una demanda sentida de la comunidad educativa del centro», señalan. Durante el presente curso, se han vuelto a recabar firmas por la Junta de Delegados (en total más de 500 firmas) y se ha canalizado de nuevo la petición a través de los representantes de alumnos del Consejo Escolar a la administración competente, «que ha vuelto a desoír nuestras peticiones y que, como toda respuesta, ha vuelto a denegar toda implantación de nuevos idiomas con la publicación de la Resolución de 19/04/2024, de la Dirección General de Inclusión Educativa y programas, por la que se autoriza la implantación de enseñanza de idiomas de régimen especial en escuelas oficiales de idiomas de la comunidad autónoma de Castilla-La Mancha a partir del curso 2024-2025 (DOCM 25.04.2024)». Argumentan los alumnos que en dicha resolución, y «sin motivación alguna, no se autoriza ninguna de las lenguas solicitadas, ni siquiera en el caso de portugués, que sin embargo sí se imparten, y se están ampliando sus autorizaciones, en otras escuelas como Talavera y Guadalajara». «Finalmente, con fecha 24 de mayo recibimos de nuevo un correo dirigido desde el Servicio de Plurilingüismo, en el que de nuevo vuelven a insistir en su negativa a autorizar idiomas nuevos en Toledo, alegando que no pueden atender todas las propuestas por la sostenibilidad de las mismas (profesorado, espacios, alumnado interesado…). Teniendo en cuenta estos vacíos argumentos, seguimos sin comprender por qué nuestra escuela no alcanza la sostenibilidad apropiada que sin embargo sí han conseguido Talavera de la Reina y Guadalajara, dado que ni el espacio, ni el profesorado ni mucho menos el alumnado interesado (como se ha demostrado con la recogida de firmas) suponen un problema». Niegan los alumnos otro «sorprendente» argumento esgrimido por la administración educativa, el relativo a los grupos con pocos alumnos en idiomas minoritarios, entendiendo el servicio de plurilingüismo que esta situación entorpece la dinámica atractiva y motivadora en el proceso de enseñanza- aprendizaje en el aula, «siendo, a nuestro juicio, todo lo contrario». La lengua rusa Además, y en el caso particular de la enseñanza de la lengua rusa, que se está impartiendo de manera no oficial, a través de un Proyecto de Singular de Centro, que sí ha autorizado la administración, «no entendemos por qué una y otra vez se niega su implantación oficial, cerrándonos toda oportunidad de obtener una certificación oficial, a pesar de pagar tasas escolares como si se tratara de una enseñanza oficial». Añaden los alumnos que «esta negativa frontal choca con la buena acogida por parte del alumnado desde que se impartió por primera vez, en el curso escolar 2021-2022, todo ello unido a que, además, y entre otros motivos, a causa del conflicto, es necesario promover su conocimiento para poder responder a las necesidades de ayuda y de integración que los afectados ucranianos necesitan, puesto que en ese país el ruso es la lengua más hablada». Ante la falta de respuesta a los constantes escritos, los afectados piden que se abran nuevas vías de interlocución con la administración responsable, «al haberse agotado las propias del procedimiento administrativo, y haber cerrado todo canal de reclamación». Finalmente, «reclamamos nuestro derecho a ampliar nuestra formación a otras lenguas, algunas de ellas, como el árabe, directamente ligadas a nuestra historia y nuestras raíces, que no olvidemos, también son lingüísticas. El turismo creciente y el acceso cada vez más agresivo al mercado laboral, hacen imprescindible un acceso en igualdad, para todos las familias y economías a la cada vez más imprescindible, formación en idiomas y reclamamos, de la administración competente, una respuesta motivada que acceda a nuestras peticiones».