El monumento romano mejor conservado del mundo está a una hora de avión desde España
El Arco de Trajano de Benevento, ubicado al sur de Italia, emerge como un símbolo extraordinario de la arquitectura y el arte romano. Construido a principios del siglo II d.C., este monumental arco de triunfo no solo es el mejor conservado del mundo en su categoría, sino que también es un testimonio vivo de las glorias militares y administrativas del Imperio Romano.
El Arco de Trajano fue erigido para conmemorar la apertura de la vía Trajana, una importante ruta que conectaba Benevento con Brindisi a lo largo de la costa adriática italiana. Originalmente conocido como Porta Aurea, este arco marcaba el inicio de esta vía estratégica, facilitando el comercio y la movilidad militar en la región. A lo largo de los siglos, el monumento ha resistido múltiples restauraciones debido a daños causados por terremotos y el paso del tiempo, asegurando así su preservación hasta la actualidad.
Con una altura de 15,6 metros y un ancho de 8,6 metros, el Arco de Trajano destaca por sus impresionantes relieves escultóricos. Estos relieves, meticulosamente tallados, narran diversas escenas de la vida militar y administrativa del emperador Trajano. En la fachada orientada hacia la ciudad, se encuentran representados eventos de la vida cotidiana de Trajano y su compromiso con Roma, mientras que en el lado opuesto, se celebran las victorias militares y la expansión del Imperio hacia Dacia.
Significado histórico y cultural
El arco no solo sirvió como un monumento conmemorativo, sino también como un símbolo de la política imperial romana. Los relieves que adornan sus paredes no solo exaltan las conquistas militares, sino que también destacan las políticas internas, como el Congiarium y la Institutio Alimentaria, programas que proporcionaban alimentos y otros recursos esenciales al pueblo romano. Estas representaciones no solo eran propaganda política, sino que también buscaban consolidar el apoyo popular hacia el emperador.
A lo largo de su historia, el Arco de Trajano ha sido sometido a numerosas restauraciones para preservar su integridad estructural y artística. Desde los tiempos de Urbano VIII hasta las intervenciones posteriores a los terremotos, cada restauración no solo ha reparado los daños, sino que también ha garantizado que el monumento continúe siendo accesible y comprensible para las generaciones futuras.
A día de hoy, el Arco de Trajano atrae a visitantes de todo el mundo, quienes quedan maravillados por la habilidad artística y la significancia histórica que encierra. Este monumento no solo es un punto de interés arqueológico, sino también una ventana al pasado glorioso de Roma y su influencia en la civilización occidental. La ciudad de Benevento, que alberga este tesoro histórico, se ha convertido en un destino imperdible para los amantes de la historia y la arquitectura antigua.