«Madrid nos trae aguas contaminadas al igual que la comarca de La Sagra»
Rubén Lozano Guerra (Toledo, 1976) ha mamado la política desde pequeño. Su madre fue concejal de UCD (Unión de Centro Democrático) en el municipio toledano de La Torre de Esteban Hambrán en los primeros años de democracia. Su padre, ajeno a este mundo, trabajó en una tienda de ultramarinos. Cuando cumplió 8 años su familia puso rumbo a la capital castellano-manchega. Apasionado del deporte (lleva 40 maratones en sus piernas) tuvo que dejar su plaza como profesor de Historia en Olías del Rey para asumir un nuevo reto en su vida: ser el concejal de Río Tajo, Medio Ambiente y Deportes en el Ayuntamiento de Toledo. — Río Tajo, Medioambiente, Deportes... Como buen deportista que es, le van los retos... — Intento llegar a todo aunque hay veces que me falta tiempo. Muchas veces tienes que correr demasiado para llegar a cubrir un poquito los objetivos que te planteas. El deporte es mi pasión y el medio ambiente y el río Tajo es el reto de mi vida porque es una concejalía nueva y en la que está todo por hacer. Partimos desde cero con un trabajo que está siendo muy intenso y apasionante y estoy aprendiendo muchísimo de gente que tiene muchos conocimientos. Es un reto que asumo con muchas ganas y mucha fuerza. — Hace unas semanas se cumplió el primer año de legislatura. ¿Satisfecho con el balance? — A nivel personal reconozco que ha sido un año duro porque el nivel de trabajo y exigencia es muy alto pero estoy muy satisfecho porque sin haber cumplido todos los objetivos, que intentas plantearte en un primer momento, creo que hemos alcanzado bastantes. Hemos dado muchos pasos y hemos sentado las bases para el resto de la legislatura. El balance es francamente positivo. — ¿Alguna espinita clavada? — Me hubiera gustado cerrar algún vertido más al río Tajo. También que el problema del azud de Santa Ana estuviera resuelto y que a nivel deportivo, hubiésemos avanzado un poquito más. Pero creo que hemos conseguido muchas cosas que eran impensables hace un año. — Habla de los vertidos al Tajo, precisamente la Cátedra del Tajo UCLM detectó 26 puntos de vertidos irregulares y sin autorización. En lo que va de mandato han cerrado tres. ¿Cuáles son los pasos más inmediatos que darán en materia hídrica? — La prioridad ahora está en la Universidad de Castilla-La Mancha, en el campus universitario, y en la depuradora municipal del Polígono. En el proyecto de la Universidad de Castilla-La Mancha hay mucho trabajo puesto y mucho interés porque sería reutilizar todo ese agua para funciones de riego y un tercer uso. En cuanto a la depuradora es el principal vertido que hay en la ciudad al río desde nuestras depuradoras municipales, y cerrar este punto va a ser un elemento fundamental en este interés de cerrar estos puntos que detectó la Cátedra del Tajo que en muchos casos son aliviaderos cuando hay fuertes tormentas. A día de hoy, aspirar a que el problema de la depuradora se resuelva, es afrontar el principal punto de vertido de la ciudad al río y si lo conseguimos, tendremos mucho avanzado. — ¿Qué fecha manejan para su cierre definitivo? — El tema de la depuración de aguas está ahora en un proceso de licitación. Ese pliego tiene unos plazos de concurrencia de adjudicación y creo que en este año el que se adjudique el nuevo contrato de depuración de aguas va a ser clave para que este punto de vertido pueda pasar a la historia. Es nuestra prioridad y el punto más sensible y más importante que tenemos que eliminar. — Carlos Velázquez, el alcalde, dijo que se marcaba como objetivo acabar con todos los puntos de vertidos al Tajo en esta legislatura. ¿Lo ve posible o se quedará en una promesa incumplida? — Hay muchos puntos que son aliviaderos y que solo, digamos, hacen un vertido al río cuando hay fuertes tormentas, como hemos tenido con la Dana del pasado mes de septiembre. Pero sin duda, el haber cerrado ya tres y afrontar de inmediato el tema de la Universidad y sobre todo, el de la depuradora del Polígono, me parece un objetivo alcanzable y del que creo que a final de legislatura podremos sentirnos muy orgullosos de que la ciudad de Toledo ya no vierta aguas fecales o contaminadas al río. Como objetivo lo veo perfectamente realizable. Estamos en una situación en la que la inercia y la colaboración de otras instituciones de administraciones de empresas es muy favorable y en esto, una de las grandes satisfacciones que me he llevado, es que creo que todos caminamos en el mismo sentido y que el río nos interesa a todos de una manera o de otra. Tener un río más saludable y accesible es beneficioso para toda la ciudad de Toledo. — Otra de las conclusiones de este estudio fue que la alta contaminación proveniente de Madrid, a través del Jarama, es la principal causante de las espumas del Tajo a su paso por Toledo. Desde la oposición han criticado que el principal vertido que tiene el Tajo se llama 'Ayuso'. ¿Han hablado con la Comunidad de Madrid o tienen intención de hacerlo? — Nosotros con la Comunidad de Madrid no hemos hablado directamente. Hemos hablado, en muchas ocasiones, con la Confederación Hidrográfica del Tajo. Es razonable que donde más gente vive más uso haya del agua y posiblemente, haya más vertidos o más aguas contaminadas. Lógicamente en una provincia como Cuenca, que hay mucho despoblamiento, los problemas son menores. A más población generamos más residuos más contaminación y es cierto que Madrid, a través del río Jarama, nos trae aguas contaminadas, de la misma manera que también nos trae agua contaminada toda la comarca de La Sagra que está creciendo muchísimo. Llegados a este punto, cada uno tiene que asumir sus competencias, la Comunidad de Madrid, el Ministerio y los ayuntamientos de toda La Sagra El problema es que no se depuran las aguas y no se depuran las aguas en el río Jarama, no se depuran en los arroyos que tenemos próximos a Toledo, en poblaciones como Illescas o Yuncos, y todo eso, nos llega a Toledo. Así que, de la misma manera que nosotros trabajamos para cerrar vertidos, aguas arriba deben realizar esa labor. Es una responsabilidad que debemos afrontar todos sin fisuras. — El trasvase tampoco ayuda a mejorar esta situación... — El trasvase no es que no ayude, el trasvase es un problema del río Tajo y la contaminación es otro problema diferente. Si tuviéramos mayor caudal, posiblemente podríamos disolver o diluir esa contaminación, pero tenemos un trasvase que no cumple con esos caudales mínimos y por otro lado, tenemos una contaminación del agua que tampoco nos beneficia. Entonces nos encontramos con esos dos problemas; el trasvase que no es competencia del Ayuntamiento y la contaminación de la que nos estamos encargando de todo lo que ocurre en nuestro término municipal. Son dos problemas que afectan a Toledo. Ojalá se cumplieran esos caudales mínimos y ojalá que otras administraciones procedieran a depurar sus aguas mejor. — Hace unos días se hizo viral el video de unos niños bañándose en el río Tajo a su paso por Toledo. ¿Qué piensa cuando ve estas imágenes? — No voy a prometer que nos vayamos a bañar en el río. Creo que es una idea que tengo muy clara, no voy a decir cosas que a día de hoy y en esta legislatura no se puedan cumplir. Soy usuario y me baño en el río Alberche que pasa muy cerca de mi pueblo y es una maravilla poder bañarte en el río. Pero a día de hoy el baño en Toledo está prohibido. Me parece que es una imprudencia y sería deseable -este sí que es un objetivo que me planteo- que el río Tajo fuera apto para practicar deportes acuáticos como el remo o el piragüismo. Sería un paso más en el uso del río aunque no llegase a ese baño. — Medioambiente es otra de las áreas que gestiona. Desde el Ayuntamiento han puesto en marcha un nuevo Plan de Arbolado. ¿Qué actuaciones incluye más inmediatas? — Nosotros presentamos el año pasado la primera fase del Plan de Arbolado. Fue una fase en la que vamos a priorizar todo el presupuesto prácticamente en árboles, la masa arbórea de la ciudad tiene que multiplicarse. El año pasado sobrepasamos los 1,000 árboles plantados y para la próxima campaña, entre octubre y marzo, la intención es superar los números del año pasado e incluso aproximarnos a los 1.500 en toda la ciudad. Las actuaciones van desde repoblar alcorques hasta muchos parques que después de Filomena quedaron bastante arrasados. También hay otra prioridad que es ajardinar y arbolar espacios que, a día de hoy, son 'islas de calor' como el tramo comprendido entre San Juan de los Reyes y la plaza del Conde donde se hizo una obra en el pavimento pero no se plantaron árboles. Esto es una inversión a largo plazo que tendrá muy buenos resultados. Además vamos a actuar en muchas avenidas, en el Casco Histórico (plaza plaza del Ayuntamiento) y ahora estamos pendientes de un proyecto con el Consorcio que se presentó hace dos o tres años en algunas plazas y calles, como la calle La Plata, Cuesta de las Armas, Juego de Pelota, plaza de los Postes, plaza del Salvador..) En definitiva, hacer actuaciones en todos los barrios en función de las características de cada uno. Tenemos actuaciones entre Santa Bárbara y el Polígono, en el parque de Polvorines y en La Peraleda tenemos un proyecto que creemos que va a ser una solución también para la contaminación acústica. Pretendemos hacer una intervención muy importante de la mano de empresas que están involucradas en asumir este reto de reverdecer Toledo. — Un plan de arbolado que para el PSOE se traduce en «120 árboles para toda la ciudad con un sobrecoste de 100.000 euros»... — Unas declaraciones que lógicamente yo no comparto. El año pasado plantamos más de 1.000 árboles y este año vamos a seguir con ese objetivo de llegar a los 1.500. Lo que no entiende el Partido Socialista es que no cuesta lo mismo poner un árbol en la plaza de Zocodover que poner un árbol en un parque; los costes son muy diferentes y nosotros vamos a actuar en algunas zonas urbanizadas, pero también tenemos intención de actuar en zonas donde la plantación es mucho más asequible y donde podemos plantar muchísimos más ejemplares con un coste muy reducido. — Toledo, Ciudad Europea del Deporte 2025. ¿Qué es lo primero que pensó cuando supo que la ciudad había sido una de las elegidas? — Cuando me dicen 'Toledo, Ciudad Europea del Deporte' la primera reacción que me produce es mucho trabajo porque durante muchos meses hemos trabajado intensamente en desarrollar un programa y una candidatura que al final ha demostrado que era de las más potentes. A partir de ahí, siento una satisfacción muy grande cuando los evaluadores nos reconocen que es un gran trabajo. Recuerdo que llegamos a un momento clave que es el aniversario del primer año de legislatura y seis minutos antes de la comparecencia del equipo de gobierno, nos comunicaron por correo electrónico que hemos sido seleccionados. Guardo muy buen recuerdo porque hubo gente que aplaudió esa información y a partir de ese momento de alegría, pues ahora tenemos una responsabilidad muy grande porque tenemos un año muy intenso deportivamente. Presentaremos un plan de inversiones muy importante. Jamás en Toledo el deporte ha tenido esta importancia y no solo va a redundar en eventos deportivos, sino en la ampliación de oferta de instalaciones deportivas y en la mejora de su calidad. Por lo tanto, 2025 será un año clave para el deporte en Toledo. — Toledo comparte título con Segovía, Alcobendas y Santurce... — Si, pero tengo constancia de que la candidatura de Toledo ha sido muy bien valorada y ha estado muy por encima de otras... y para mí eso es un orgullos porque supone un reconocimiento a que el trabajo que hemos estado realizando estos meses ha sido bueno. Ahora no hay que mirar atrás sino para delante y demostrar que en 2025 vamos a ser la mejor Ciudad Europea del Deporte. — El próximo 9 de julio es el cumpleaños de Bahamontes, un icono del deporte y para la ciudad de Toledo. El Ayuntamiento le rendirá un homenaje con la reposición en el Miradero de su estatua tras la reparación. Sin embargo, una de las espinitas que la familia tiene clavada, al igual que el ciclista la tenía en vida, es la apertura del Museo Bahamontes. ¿Podrán dar pronto una alegría a la familia? — De las primeras cosas que tuve que hacer en este ayuntamiento cuando llegué, fue celebrar un homenaje a Fede porque cumplía 95 años. Bahamontes falleció un mes después pero nuestro mejor deportista pudo disfrutar de ese homenaje que le hizo la ciudad en vida. Con su muerte conseguimos asumir un reto: que ese funeral se celebrase en el Ayuntamiento y estuviera a la altura de lo que se esperaba. Y, ahora, esperamos que el día 9 la escultura de Fede esté puesta en su sitio. con unas medidas de protección y seguridad que van a impedir cualquier acto vandálico. Fede volverá a ocupar el lugar que le corresponde. En cuanto al museo, yo ya planteé la necesidad que tenemos de que ese museo esté en Toledo y tengo el compromiso de su familia para que su legado o parte de él pueda estar aquí en Toledo. Ahora nos hace falta ese compromiso de la familia para depositarnos ese legado de Bahamontes y en cuanto lo tengamos, ojalá sea en esta legislatura, podremos abrir ese museo porque para mí, más que una espinita, sería tener una satisfacción cumplida. Es una deuda que le debe la ciudad a Bahamontes. — ¿Qué emplazamiento barajan? — Fede tiene que tener su museo en el Casco y yo creo que muy cerca de la plaza de Zocodover. La plaza de la Magdalena, donde tuvo la tienda de bicicletas durante años que además está dedicada al 'Aguila de Toledo', sería el entorno más razonable.