Extremadura: Guardiola transmite "tranquilidad" tras la ruptura del pacto con Vox, que tiene un consejero
Tan solo un año después de convertirse en presidenta de la Junta de Extremadura, María Guardiola va a quedarse sin la presencia de Vox en su Gobierno. La presidenta de la Junta, cabe recordar, tomó posesión el 17 de julio tras unas semanas de duras negociaciones con los de Santiago Abascal, ya que rechazaba incorporarlos a su Gobierno y formar una coalición. Finalmente, Vox acabó entrando con un consejero, quedándose el área de Gestión Forestal y Mundo Rural, pero, 360 días después, saldrá.
Cabe recordar que, además de un consejero en la Junta, Vox cuenta con cinco diputados de los 65 que hay en el Parlamento extremeño, por lo que es un partido determinante para la gobernabilidad de la autonomía ya que el PP tiene 28 escaños (igual que el PSOE) y la mayoría absoluta está en 33. En todo caso, pese al movimiento de Vox, de romper los gobiernos autonómicos, Guardiola ha transmitido "tranquilidad" a los miembros de su Ejecutivo porque van a seguir "igual" porque "prácticamente" ya era un Gobierno "en solitario" porque Vox solo tiene un consejero.
De hecho, fuentes de la Junta explican a LA RAZÓN que ahora mismo los miembros de Vox están "cómodos", pero asumen que "si tienen que salir, saldrán". Sobre todo, apuntan a que los diputados seguirán las directrices de Vox, aunque sí existe alguna duda con respecto al consejero Ignacio Higuera, ya que es independiente y puede rechazar seguir la consigna del partido. Higuera, según, explican las mismas fuentes, estaba "plenamente asentado" en el equipo de Gobierno.
La Junta está gobernada ahora por el PP y está empezando ya a notarse la huella del Ejecutivo de Guardiola en materia económica, con algunos indicadores que reflejan la buena evolución. Y los populares señalan que quedan tres años de legislatura por delante para continuar con el trabajo, aunque evitan precisar cómo se continuará: la propia Guardiola señalaba este mismo jueves que el PP no ha incumplido ninguno de los 60 puntos del pacto autonómico que firmaron con Vox, por lo que no entendía la decisión de salir del Ejecutivo. De hecho, recordaba que ninguno de esos puntos incluía nada sobre migración.
En todo caso, en la Junta tampoco confían en el PSOE, quien se ha ofrecido a dar "estabilidad", porque recuerdan que está haciendo una oposición dura. En este sentido, también es verdad que los socialistas están debilitados ahora tras un reciente congreso que dividió a la formación y tras la primera derrota que han sufrido en unas elecciones europeas en la autonomía.