Han pasado más de 48 horas desde que Vox oficializó su salida de los gobiernos regionales que compartía con el Partido Popular y la sensación en buena parte de los militantes y los cargos dimitidos sigue siendo de estupor. Y eso que la dirección nacional, la misma que tomó de manera unilateral la decisión, se ha cansado de intentar explicarla por activa y por pasiva, aunque sin éxito a tenor de las fuentes consultadas. La ruptura de Vox se materializó en 36 horas frenéticas (aunque en realidad venía rumiándose mucho antes). Un día y medio de llamadas y reuniones en las que hubo muchas voces discrepantes . Lo nunca visto antes en un partido acostumbrado a acatar todo lo que... Ver Más