Con los termómetros marcando 40 grados se espera que, en los próximos días, las temperaturas superen los 42 grados en buena parte de Grecia. Ante esta ola de calor persistente, las autoridades helenas ya han advertido de los graves efectos que el calor extremo puede tener sobre la salud humana. Según el informe meteorológico de emergencia emitido por Servicio Nacional de Meteorología de Grecia, (EMY por sus siglas en griego), la ola de calor se debe a la corriente aérea de componente suroeste que predomina en los niveles inferiores de la atmósfera en las costas de África y el Mediterráneo central, y que transportará masas de aire caliente a Grecia, provocando elevadas temperaturas en todo el país hasta, al menos, el próximo viernes. La ola de calor afecta a los Balcanes occidentales; Albania, Serbia y Bosnia con temperaturas que están superando los 40 grados centígrados. En Grecia las altas temperaturas se están registrando en el norte y el oeste del país. «En Creta y en las islas Cícladas, los termómetros no superarán los 32 grados centígrados, e incluso el viento del norte `Meltemi´, producirá una bajada importante de las temperaturas durante la noche», explica a este diario el meteorólogo de la televisión pública griega ERT, Panagiotis Giannopulos. «En comparación con la ola de calor de julio del año pasado, la más calurosa y larga de los últimos 70 años en el país, este fenómeno solo afectará a la Grecia occidental », recalca Giannopulos. El denominado fenómeno `hot dry windy´(viento cálido y seco), junto con las altas temperaturas y la sequedad de la vegetación provocada por el mes de junio más caluroso de las últimas décadas en Grecia, mantienen en alarma a Protección Civil debido a que estos tres componentes, son los causantes de los temidos incendios forestales que cada año reducen a cenizas miles de hectáreas de bosque en todo el país. Según un informe de la agencia Copernicus , el pasado mes de junio fue, a nivel mundial, el junio más cálido , con una temperatura media del aire en la superficie de 16,66 grados centígrados, lo que supuso en aumento de 0,14 grados con respecto al año anterior. A pesar de que la EMY publicó el pasado viernes un comunicado para informar sobre la emergencia por la ola de calor de larga duración que golpea el norte y el oeste del país, los meteorólogos griegos no se ponen de acuerdo sobre si se trataba o no de una ola de calor o, simplemente, altas temperaturas prolongadas. «Una cosa es que protección civil esté en alerta y preparada, y otra que la gente se asuste ante la posibilidad de una muerte segura . Estamos ante una alerta de incendio, no una alerta de temperaturas», afirmó tajante este sábado la meteoróloga, Christina Souzi, durante el parte del tiempo en el canal privado de televisión 'Skai', que ha criticado duramente a los compañeros que atemorizan a los ciudadanos con temperaturas que, según la experta, «son normales para esta época». «Es una mala interpretación del fenómeno. Hará calor, sí», explicaba otro experto que pedía «paciencia y tranquilidad porque hemos vivido cosas peores». Giannopulos también es de la opinión de que se está exagerando el fenómeno y que, salvo en el norte y el oeste del país, las temperaturas estarán dentro de la normalidad para la época durante los próximos días. Sin embargo, el meteorólogo Takis Arniakos, uno de los más veteranos del país, opina que «estamos pasando de una ola de calor prolongada a una ola de calor» al mismo tiempo que advertía que el calor será «insoportable» en la Grecia continental y algunas islas. Por su parte, a los habitantes de las regiones afectadas por las altas temperaturas les importa poco el nombre que los expertos decidan dar al fenómeno que está provocando que en la isla de Ítaca, en el archipiélago del Jónico, los termómetros lleven marcando tres días consecutivos temperaturas que superan los 40 grados centígrados.
